Identifica a los pacientes que podrían beneficiarse de tratamientos que se creía eran ineficaces.
El grado de vascularización del glioblastoma predice su grado de respuesta a las terapias anti-angiogénicas, según un estudio de la Universidad de Stanford. Examinando los patrones de perfusión por resonancia magnética en tumores de 117 pacientes, el equipo dirigido por Daniel Rubin halló que aproximadamente la mitad estaban profusamente irrigados. ...
El grado de vascularización del glioblastoma predice su grado de respuesta a las terapias anti-angiogénicas, según un estudio de la Universidad de Stanford. Examinando los patrones de perfusión por resonancia magnética en tumores de 117 pacientes, el equipo dirigido por Daniel Rubin halló que aproximadamente la mitad estaban profusamente irrigados. Esta observación mostró ser consistente con el elevado nivel de expresión de genes involucrados en la protección frente a la hipoxia, como demostraron experimentos ulteriores.
Sin embargo, el hallazgo más sorprendente fue la mayor supervivencia de los pacientes con tumores altamente vascularizados tratados con agentes anti-angiogénicos, lo que está en claro contraste con 2 recientes ensayos de fase III en los que bevacizumab, un agente biológico con este mecanismo de acción, no proporcionó beneficio alguno en este aspecto. La prolongación media de la supervivencia en el actual estudio fue de más de 1 año, lo que indica que algunas terapias que en realidad pueden ser eficaces no muestran beneficio cuando son testadas en grandes grupos de pacientes no seleccionados.
Rubin y sus colaboradores esperan que sus resultados reaviven el debate sobre el uso de anti-angiogénicos en el glioblastoma y reafirmen la noción de que este tipo de cáncer presenta una elevada variabilidad.