En la mañana de este martes, 12 de septiembre, 70 organizaciones de profesionales de la salud, entidades sociales y sindicales, liderados por la Red de Denuncia y Resistencia al Real Decreto 16/2012 (REDER), han firmado con los partidos de la oposición en el Congreso de los Diputados un pacto por un sistema sanitario público y universal, en reacción a la reforma sanitaria emprendida por el Gobierno del Partido Popular hace ahora cinco años con el referido decreto.

Pie de foto: Acto político social por la sanidad universal (foto: Stéphane M. Grueso, @fanetin)

Entre esas decenas de organizaciones profesionales sanitarias sumadas al pacto, se encuentraron las principales. Así suscribieron el documento entidades como las Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC), la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria (SESPAS), la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) y la Asociación de Enfermería Comunitaria (AEC). Junto a ellas, también firmaron otras entidades de inspiración sanitaria como la Federación de Asociaciones en Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) y plataformas autonómicas pro sanidad universal como PASUCAT, de Cataluña, y ODUSALUD, de la Comunidad Valenciana.

Pie de foto:  De Izda a Dcha: Rosario Zanabria (ARI-PERÚ), el doctor José Félix Hoyo (Médicos del Mundo) y el doctor Juan Luis Beltrán (SESPAS) (foto: Stéphane M. Grueso, @fanetin)

En nombre de todas entidades de naturaleza sanitaria habló el doctor José Félix Hoyo, presidente de Médicos del Mundo. Según sus palabras, la unión de tantas organizaciones médicas, sociales, sindicales y políticas es una apuesta decidida por acabar con las injusticias lastradas desde 2012 en materia de sanidad. Tal como afirmó, la reducción de la cartera básica de servicios, la progresión de los copagos y la exclusión sanitaria de determinados colectivos, como las personas migrantes en situación irregular, han causado un especial daño en los sectores más vulnerables de la sociedad, abriendo brechas de desigualdad entre la población en materia de salud.

Pie de foto: Firmantes del pacto en la escalinata del Congreso (foto: Stéphane M. Grueso, @fanetin)

Según los promotores del pacto, los 5 años de vigencia de la reforma sanitaria emprendida por el Gobierno se han caracterizado por aplicar un modelo de sistema sanitario que no fue consensuado políticamente y que, entre otras deficiencias, no incluyó una memoria económica que justificara de manera objetiva los recortes presupuestarios que se adoptaron. Dicha reforma dejó fuera del sistema de atención a cientos de miles de personas, con la retirada, reconocida por el propio Gobierno, de 873.000 tarjetas sanitarias, lo que supuso severas críticas de numerosos organismos de derechos humanos de todo el mundo. Algo que ocurrió paralelamente a una importante contracción en la inversión pública en sanidad. De forma que no solo se alejó la calidad de los servicios asistenciales en España de la media europea, sino que también empeoraron de forma manifiesta las condiciones laborales de los profesionales sanitarios.

Como parte esencial del pacto, también firmaron los partidos de la oposición parlamentaria, añadiendo un compromiso firme por acometer, en cuanto sea posible, aquellas medidas legislativas que resulten imprescindibles para garantizar el carácter solidario del Sistema Nacional de Salud de modo que su calidad y universalidad vuelvan a convertirle en un pilar fundamental del Estado Social de Derecho.

Pie de foto: Dr Jesús María Fernández (PSOE)

Esa mayoría parlamentaria de oposición firmante estuvo constituida por PSOE, Podemos, En Comú Podem, En Marea, Izquierda Unida, PNV, Compromís, ERC, PdCAT, Nueva Canarias, Coalición Canaria y EH-Bildu.

Junto a los partidos, también se sumaron las principales centrales sindicales: CCOO, UGT y USO. Sin olvidar las principales ONG de derechos humanos, encabezadas por Médicos del Mundo. Tales como Amnistía Internacional, Oxfam-Intermón, Red Acoge, CEAR y SOS Racismo. Y distintas organizaciones de personas migrantes como ARI-PERÚ, por ser este uno de los colectivos más afectados por la aplicación del RDL 16/2012.

Según declararon los firmantes, el pacto es la rúbrica a medidas cívicas como las acciones de resistencia, la objeción de conciencia y las denuncias de la sociedad civil, como reacciones a la exclusión sanitaria. Iniciativas que fueron la espoleta que movió a la mayoría de las comunidades autónomas a adoptar mecanismos destinados a corregir los perniciosos efectos de la reforma popular de la sanidad, como manera de evitar lo que, sin duda hubiera sido, en su opinión, una crisis social y humana de primera magnitud.

Otras organizaciones y plataformas ciudadanas por el derecho a la salud adheridas al pacto

ANESVAD

Asociación de Usuarios de la Sanidad de la Región de Murcia

CESIDA Coordinadora Estatal de VIH y sida Comitè 1r Desembre - Plataforma d´ONG-SIDA de Catalunya

Federación de Planificación Familiar Estatal (FPFE)

Federación Estatal de Asociaciones de personas afectadas por drogas y/o VIH (FAUDAS)

Médicos del Mundo

Medicusmundi

Observatorio del Derecho Universal a la Salud de la Comunitat Valenciana (ODUSALUD)

Plataforma "Ciudadanía contra la exclusión sanitaria"

Plataforma per una Atenció Sanitària Universal a Catalunya (PASUCAT)

Plataforma Salud Universal Aragón

Rede Galega en Defensa do Dereito á Saúde

Salud por Derecho

Salut i Familia