Fenin ha iniciado la cuenta atrás para el despegue del Código Ético del Sector de Tecnología Sanitaria. A partir del 1 de enero de 2018 entrará en vigor el resultado a dos años de trabajo en los que la federación ha apostado por responder a "exigencias sociales como la independencia y la transparencia en lo relativo a la formación científico-profesional", tal y como ha explicado la presidenta de Fenin, Mª Luz López-Carrasco en un acto celebrado esta mañana en Madrid y que ha reunido a los principales entes implicados en lo que supondrá un cambio en la relación entre las empresas de tecnología sanitaria y los profesionales e instituciones del sector sanitario.

"Si existe un sector de innovación continua ese es el sector de tecnología sanitaria. Esta evolución nos permite responder a las demandas de pacientes, de profesionales y del propio sistema, que a su vez se encuentra en constante evolución debido a los cambios demográficos, tecnológicos y sociales", ha explicado López-Carrasco en la presentación de una jornada marcada como broche final a todas las acciones y comunicaciones formativas que Fenin ha ido realizando durante todo 2017 para introducir la llegada del Código Ético.

Los inicios de cambio se produjeron en diciembre de 2015, tal y como ha explicado la presidenta de Fenin, cuando MedTech Europe decidió modificar su código ético. A partir de ese momento, la patronal española comenzó un camino en el que se decidieron "definir y trasponer esa normativa para adaptarla" a las particularidades del sector español. "Fenin ha sido punta de lanza a este nivel. Las asociaciones tenían hasta 2020 para llevarlo a cabo por ellos lo hicieron casi inmediatamente", ha explicado Pablo Rojas, representante de MedTech Europe que ha acudido a la jornada y ha destacado que el cambio, pese a tratarse de un regulación sectorial, se está transmitiendo en la mayor parte del planeta. "Creo que Fenin ha tomado una decisión muy valiente y certera de unirse a nosotros en la cresta de la ola", ha declarado Rojas, que pese a ser consciente de que un cambio así "genera incertidumbre y dudas", entre todos va a poder solucionarse "cualquier problema que pueda venir".

Jaime Vives, coordinador de la Comisión de Seguimiento del Código Ético de Fenin, ha tomado la palabra para explicar a los asistentes las principales novedades del Código Ético basado en el "diálogo, consenso y participación de los profesionales sanitarios". Su aplicación implica una formación médica más independiente a fin de evitar conflictos de intereses. Esto conlleva que las empresas del sector de la tecnología sanitaria tendrán que destinar sus ayudas a la formación a través de instituciones y organizaciones sanitarias, las que serán encargadas de elegir a los profesionales, algo que no podrán hacer las empresas. A su vez, las ayudas que aporte la industria se harán públicas en la web de MedTech Europe. "Sabemos que vamos a tener escenarios que no hemos previsto en el piloto pero sabemos que tenemos una buena base y que vamos a tener pocas dificultades para solucionarlas", ha zanjado Vives.

José Luis Blasco, Socio de la auditoria KPMG, encargada de trabajar en el Código Ético junto a Fenin, - que ha definido como "el trabajo de mucha gente durante mucho tiempo"- ha destacado la labor de la fase de prueba, en la que se demuestra "el nivel de compromiso" que ha existido en favor del código y en la que las empresas "han aprendido conjuntamente con nosotros a llevar a cabo un proceso que era nuevo". En este tiempo, se han logrado validar 71 eventos con 72 usuarios solicitados y 21 entidades cuentan con el sello ético que otorga Fenin. El sello es una de las novedades que Fenin aplicará a partir del 1 de enero y que está hecho para terceros receptores -asociados o no- que busquen acreditar que asumen el código y que cumplen con la ética que la sociedad actual exigen a las empresas del sector.