El estudio genómico es el primero que clasifica los tumores fibroepiteliales mediante expresión génica.
Un estudio liderado por el grupo de Genómica Traslacional del Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO) logra clasificar las lesiones fibroepiteliales de mama según sus características genómicas. Los nuevos hallazgos, publicados recientemente en Molecular Oncology, permiten una clasificación más objetiva, predecir más adecuadamente el pronóstico de estas lesiones, de difícil ...
Un estudio liderado por el grupo de Genómica Traslacional del Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO) logra clasificar las lesiones fibroepiteliales de mama según sus características genómicas. Los nuevos hallazgos, publicados recientemente en Molecular Oncology, permiten una clasificación más objetiva, predecir más adecuadamente el pronóstico de estas lesiones, de difícil manejo dada su gran variabilidad de pronóstico y evolución. Hasta ahora no había ningún estudio previo que hubiera caracterizado estos tumores a este nivel ni que asociase los resultados genómicos a su pronóstico y evolución.
Las lesiones fibroepiteliales de mama engloban un grupo muy heterogéneo, desde lesiones con comportamiento benigno hasta lesiones con un comportamiento muy agresivo. Los tumores fibroepiteliales de la mama representan hasta un 15% de las tumoraciones que aparecen en la mama, siendo en su gran mayoria fibroadenomas y menos frecuentemente tumores Filodes. Hasta ahora la clasificación se ha basado por criterios histológicos más o menos subjetivos, dónde el patólogo analiza el tumor bajo el microscopio y lo clasifica en 4 grandes grupos. Esta clasificación histológica es muy importante dado que determinará el tratamiento a seguir. A diferencia del cáncer de mama, en estos casos puede diferir mucho, desde la conducta expectante y la observación, la enucleación simple del tumor, hasta un tratamiento quirúrgico y sistémico agresivo.
Por ejemplo, en un extremo se encuentran los fibroadenomas de mama que sólo necesitan una pequeña resección de la lesión; y en el otro extremo los tumores filodes malignos que a menudo recidivan y necesitan ser tratados agresivamente incluso con quimioterapia en algunos casos. En la zona intermedia existen fibroadenomas atípicos y tumores filodes benignos e incluso los llamados intermedios. En general, aunque una buena cirugía suele ser suficiente para curar a la paciente, algunas lesiones fibroepiteliales pueden volver a aparecer e incluso metastatizar a órganos a distancia.
Por primera vez se ha estudiado la expresión génica de una serie amplia de estos tumores y los hallazgos genómicos han aportado datos mucho más objetivos sobre su clasificación y diagnóstico de lo que permite la histología.