El primer año de funcionamiento del dispositivo se salda con 10 millones de recetas emitidas y menor afluencia a las consultas de los médicos de familia.
El consejero de Salud y Servicios Sociales de La Rioja, José Ignacio Nieto, ha informado del grado de implantación de receta electrónica en La Rioja cuando se cumple el primer año de prescripción y dispensación electrónica en los centros de salud y hospitales. En este sentido, La Rioja culminó el ...
El consejero de Salud y Servicios Sociales de La Rioja, José Ignacio Nieto, ha informado del grado de implantación de receta electrónica en La Rioja cuando se cumple el primer año de prescripción y dispensación electrónica en los centros de salud y hospitales. En este sentido, La Rioja culminó el proceso de instauración de la receta electrónica en todos los ámbitos asistenciales en los primeros días de diciembre de 2014 y, desde entonces, está en disposición de hacer interoperable su receta electrónica con el resto del Sistema Nacional de Salud. La Rioja concluyó el proceso en apenas 7 meses, “un tiempo récord en el que no se registraron incidencias significativas y que situó a la comunidad en una posición privilegiada para afrontar la unificación del sistema a nivel nacional”.
En este tiempo se han prescrito 10.262.134 recetas y ya se han dispensado en las oficinas de farmacia 4.073.587 recetas. Una de las mayores ventajas, además de que este sistema ha permitido una mejor organización de la medicación, ha sido la descongestión en las consultas al reducirse las visitas de los pacientes. Además, la asistencia a las consultas de enfermos crónicos o pensionistas ha descendido. En una primera evaluación y comparando el último trimestre de 2014 (cuando ya estaba plenamente operativa la receta electrónica) con el mismo período de 2013, se constata que ha habido un descenso de un 8,7% de consultas de medicina de familia (lo que en cifras absolutas supone 39.400 consultas menos). Aunque la disminución ha sido significativa en las visitas a los médicos de familia, la reducción también se ha dejado notar en las consultas de enfermería, en torno a un 6% comparando los referidos trimestres de 2014 y de 2013.
También se preveía la disminución en los errores derivados de la lectura equivocada de las recetas (con prescripciones escritas a mano confusas e ilegibles) así como las duplicidades y las interacciones, pautas y duraciones inadecuadas de los medicamentos prescritos.Antes, los farmacéuticos riojanos dispensaban un producto diferente al prescrito en 70 de cada 100.000 recetas. Con la entrada en vigor de la receta electrónica se han reducido de 70 a 3 los errores por cada 100.000 recetas (es una reducción de un 95,7% en los errores de dispensación del producto prescrito). Este sistema, además, ayuda a mejorar la adherencia terapéutica en los pacientes crónicos debido al mayor control del paciente por parte del farmacéutico y simplifica enormemente el proceso de facturación a través del colegio.
Sólo en los centros de salud, en este primer año se han emitido 10.21 millones de recetas electrónicas, y 1.9 millones en papel, teniendo en cuenta que en mayo de 2014, éstas últimas representaban un 99,1% frente al actual 2%.En la atención especializada, la Fundación Hospital Calahorra culminó el proceso el 7 de noviembre. Desde entonces, se han emitido 10.789 recetas electrónicas frente a 2.043 en papel y, por último, el Hospital San Pedro, que lo hizo el pasado 1 de diciembre, ha prescrito en formato electrónico 35.088 recetas y 7.500 en papel.