Dormir lo suficiente es esencial para un atleta. Sin embargo, un nuevo estudio sugiere que el ejercicio intenso puede afectar el sueño tras haber estudiado los efectos de dos tandas de entrenamiento fuerte de 9 días en ciclistas.
El doctor S.C. Killer y sus compañeros descubrieron que incluso un período tan corto como nueve días de entrenamiento intenso puede causar “un declive progresivo significativo en la calidad del sueño”. También observaron que tanto el humor de los atletas como la capacidad de realizar ejercicio empeoró durante el período ...
El doctor S.C. Killer y sus compañeros descubrieron que incluso un período tan corto como nueve días de entrenamiento intenso puede causar “un declive progresivo significativo en la calidad del sueño”. También observaron que tanto el humor de los atletas como la capacidad de realizar ejercicio empeoró durante el período de observación.
Los datos también indicaban que los ciclistas pasaban más tiempo en la cama durante el entrenamiento intenso pero sin conseguir dormir. “La eficacia del sueño se vio reducida drásticamente durante el período de entrenamiento intenso”, afirman los científicos. Además, los ciclistas presentaron cambios de humor a medida que el estudio avanzaba, llegando incluso a tensión alta, ira, fatiga, confusión, depresión y sentimientos y síntomas de alto estrés.
El equipo llegó a la conclusión de que algunos hidratos de carbono adicionales reducen, pero no eliminan, los efectos del entrenamiento intenso. El estudio es una recordatorio de la importancia del sueño para recuperar fuerzas en la vida de los atletas.