El consejero de Salud ha participado en un coloquio en el que ha intercambiado impresiones sobre innovaciones posibles y claves para la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud.
Aquilino Alonso, consejero de Salud del Gobierno de Andalucía, ha afirmado en un coloquio de Europa Press celebrado en Madrid que “estamos abiertos a mejorar las subastas pero no hay alternativa ni propuesta encima de la mesa por parte de nadie”. O lo que es lo mismo: ha abierto la ...
Aquilino Alonso, consejero de Salud del Gobierno de Andalucía, ha afirmado en un coloquio de Europa Press celebrado en Madrid que “estamos abiertos a mejorar las subastas pero no hay alternativa ni propuesta encima de la mesa por parte de nadie”. O lo que es lo mismo: ha abierto la puerta por primera vez a buscar “fórmulas diferentes” para las polémicas subastas de medicamentos.
Según Alonso, el gobierno andaluz está en conversaciones con los grupos parlamentarios para trasladarles toda la información de las subastas, sin embargo también ha afirmado que la oposición no les ha trasladado sus propuestas al Parlamento. Un argumento que olvida no solo las críticas de todos los agentes sanitarios que se han ido produciendo de un tiempo aquí sino las iniciativas presentados por el PP y Ciudadanos, entre otros, para poner el punto y final a las subastas. El consejero ha insistido también en el ahorro generado por las subastas, cifrado en 121 millones de euros, algo “muy importante y que permite introducir nuevos fármacos en el sistema sanitario público andaluz”.
Por otro lado, Aquilino Alonso ha destacado la cronicidad y su abordaje como uno de los grandes retos a los que se enfrenta la atención sociosanitaria así como un elemento clave para la sostenibilidad y el futuro del Sistema Nacional de Salud.
Durante su intervención, Aquilino Alonso ha contextualizado el problema de la cronicidad acerca del cual ha dicho que “en los últimos años se han multiplicado los debates y las iniciativas”, pues existe un número de procesos crónicos cada vez mayor - cáncer, diabetes, cardiovasculares o salud mental, entre otros muchos-, que además afectan a una población cada vez más amplia y envejecida (18% población española es mayor 65 años), y que están asociados a un conjunto de factores de riesgo muy prevalentes y de difícil modificación a corto plazo, como son obesidad, tabaquismo, sedentarismo, dieta, hipertensión o polución ambiental.