Aproximadamente 4 millones de personas padecen ERC en España. De ellas unas 51.000 están en tratamiento renal sustitutivo, la mitad en diálisis y el resto con un trasplante renal funcionante. Hasta hace un año, la mayoría de los pacientes españoles en diálisis acudían al hospital al menos tres días a la semana para depurar la sangre de sus riñones. Sólo un 5,5% de ellos eran tratados en su domicilio con diálisis peritoneal y muy pocos realizaban la hemodiálisis en su domicilio con una máquina de grandes dimensiones similar a las utilizadas en los hospitales. Desde la introducción de NxStage System ONE en España hace dos años, esta situación ha empezado a cambiar y actualmente son más de 50 los pacientes que se dializan en sus propias casas con el primer dispositivo de hemodiálisis domiciliaria transportable disponible en nuestro país.

Palex Medical, empresa española especializada en soluciones hospitalarias avanzadas, distribuye en España este dispositivo, que ya ha mejorado la vida de unos 7.000 pacientes en todo el mundo, principalmente en Estados Unidos.

NxStage System ONE es un dispositivo de hemodiálisis que realiza las mismas funciones que las máquinas hospitalarias, eliminando de la sangre las toxinas que el riñón no es capaz de depurar de manera natural. El sistema permite a los pacientes renales crónicos mejorar su calidad de vida dializándose en su propio domicilio o en cualquier otro lugar en el momento que deseen.

El equipo tiene un tamaño reducido que permite transportarlo en una maleta, haciendo posible que los pacientes puedan viajar con el único requisito de contar con una fuente de alimentación eléctrica convencional. Este dispositivo se puede instalar en cualquier estancia de la casa, y su funcionamiento es sencillo, permitiendo que muchos pacientes renales crónicos que actualmente reciben tratamiento con hemodiálisis puedan realizarla en un futuro en su propio domicilio.

Además, al tratarse de una máquina de hemodiálisis domiciliaria transportable, NxStage System ONE posibilita a sus usuarios dializarse en casa con sesiones de menor duración pero con mayor continuidad, permitiendo realizar la diálisis diariamente. Este aumento en la periodicidad mejora los resultados clínicos y permite que, al ser las diálisis más cortas, los pacientes puedan recuperar una vida normal, reincorporarse más fácilmente al mercado laboral e incluso viajar.

“NxStage System ONE permite a un paciente que normalmente se dializa tres veces a la semana en el hospital durante cuatro horas, dializarse seis veces a la semana pero solo durante dos horas y media, por ejemplo”, aclara la Dra. Mª Auxiliadora Bajo, Jefe de Sección de Nefrología del Hospital Universitario La Paz (Madrid).

El tratamiento habitual con NxStage System ONE dura entre 2 y 3 horas por sesión y suele hacerse seis veces a la semana. No obstante, la pauta final de tratamiento recomendada depende de las características de cada paciente y se establece de acuerdo con el compromiso de cumplimiento entre el paciente y el médico.

Los usuarios de este sistema reciben una formación durante tres o cuatro semanas en su centro hospitalario y, al finalizar la misma, son capaces de realizar el tratamiento en su domicilio de forma autónoma. Durante este período de entrenamiento, al paciente se le enseña todo lo necesario para poder realizar su terapia, desde el manejo básico del monitor (llamado también ciclador), la gestión de posibles alarmas que se pudieran producir a lo largo del tratamiento hasta cómo solucionar posibles contratiempos técnicos o clínicos que pueden surgir durante el tratamiento. Una vez finalizado el proceso de aprendizaje, el equipo de formación colabora en la instalación del dispositivo en el domicilio del paciente y supervisa las primeras sesiones domiciliaras. Los pacientes cuentan con un manual de uso del dispositivo y una aplicación móvil para consultar cualquier duda, además de asistencia sanitaria telefónica las 24 horas los 365 días del año.

La hemodiálisis altamente frecuente supone grandes beneficios para la salud de los pacientes mejorando su supervivencia. Por un lado, disminuye el tiempo de recuperación del paciente tras el tratamiento, el consumo de medicamentos y las restricciones dietéticas y también mejora la presión arterial, la anemia y la calidad del sueño. Y por otro lado, este tratamiento incide directamente en la mejora de la calidad de vida de los pacientes, permitiéndoles una mejor integración familiar, social y laboral.