Un grupo de investigadores descubre un gen que ayuda a regular la curación de una herida y controlar la cicatrización en personas con lesiones graves o daño de ciertos órganos internos.
La proteína MG53 (foto, Li.et.al., 2015) viaja a través del torrente sanguíneo y ayuda a que el cuerpo sane las lesiones cutáneas, del corazón, de los pulmones y otros órganos sin causar cicatrices. Se trata de un descubrimiento que podría ayudar a sanar heridas abiertas, disminuir el tiempo de recuperación ...
La proteína MG53 (foto, Li.et.al., 2015) viaja a través del torrente sanguíneo y ayuda a que el cuerpo sane las lesiones cutáneas, del corazón, de los pulmones y otros órganos sin causar cicatrices. Se trata de un descubrimiento que podría ayudar a sanar heridas abiertas, disminuir el tiempo de recuperación tras la cirugía y reducir las infecciones.
“Una gran cicatriz en la piel puede causar estragos en la apariencia pero imagínese si tiene un ataque al corazón que le deja una cicatriz, podría ser mortal”, afirma Jianjie Ma, psicólogo del Ohio State y coautor del informe.
“Todos los animales presentan este gen”, añade el mismo, “y es casi idéntico en todas las especies. La proteína MG53 sana las células y el tejido dañado. Incluso acciones tan simples como caminar o teclear causan lesiones al cuerpo pero casi nunca suponen un problema ya que la MG53 repara los daños antes de que sean graves”.