Existen partes del cerebro especializadas en particular en reconocer figuras corporales de animales y seres vivos. Al medir la actividad eléctrica de cada célula, un grupo de científicos han demostrado que las neuronas individuales de una misma zona realizan tareas diferentes.
El reconocimiento facial ha sido sujeto a investigación durante muchos años. Pero, ¿qué sucede cuando no conseguimos reconocer un animal o un ser humano en base a su fisionomía y tan solo disponemos del resto del cuerpo para averiguarlo? “El mecanismo que hay detrás del proceso de reconocimiento es un ...
El reconocimiento facial ha sido sujeto a investigación durante muchos años. Pero, ¿qué sucede cuando no conseguimos reconocer un animal o un ser humano en base a su fisionomía y tan solo disponemos del resto del cuerpo para averiguarlo? “El mecanismo que hay detrás del proceso de reconocimiento es un territorio virgen para los neurocientíficos”, afirma el profesor Rufin Vogels (foto) del Laboratorio KU Leuven.
“Varios estudios anteriores realizados en monos muestran que las zonas pequeñas del lóbulo temporal son activadas cuando los monos observan el cuerpo en lugar de objetos o caras. Las pruebas de imagen nos muestran que estas regiones cerebrales corresponden a aquellas activadas una vez en humanos. Sin embargo, tan solo nos identifican las zonas pero no nos muestran qué información pasa por ellas”, concluye el mismo.