Un polisacárido vegetal protege de la gripe en un modelo animal

Investigadores de la Academia China de Ciencias Agrícolas han descubierto las propiedades antivirales de un polisacárido (PSC) extraído del fruto maduro de la planta Schisandra chinensis. En ratones infectados con el virus de la gripe A H1N1, también conocido como virus de la gripe porcina, la dosificación dos veces diarias durante cinco días preservó la supervivencia de los animales. Mientras que el 100% de los animales sin tratamiento sucumbieron al final de este periodo, todos los tratados siguieron vivos a los 9 días. La mayor supervivencia se asoció a la atenuación de la severa patología pulmonar asociada a la infección, así como a la reducción de la congestión esplénica y de la necrosis de las células epiteliales de los túbulos renales. El tratamiento también redujo el síndrome de liberación de citoquinas, con la consiguiente disminución de la inflamación sistémica.

Tiecheng Wang, co-director del estudio, afirma que estos efectos fueron más evidentes con la administración intraperitoneal, en comparación con la oral. El científico prosigue indicando que el virus de la gripe representa una formidable amenaza para la salud humana, debido a su elevada variabilidad y capacidad de propagación. Estudios previos ya habían señalada las propiedades medicinales de otros PSC vegetales, tales como los derivados de Aloe vera o de la raíz de Isatis, en las infecciones virales. Sin embargo, el PSC ahora estudiado se distingue por presentar actividades adicionales, tales como reducción del daño hepático y de los niveles de inmunoglobulinas y citoquinas en respuesta a la terapia con ciclofosfamida. Wang concluye señalando como potencial ventaja del PSC de Schisandra chinensis su actividad frente al virus en múltiples estadios de la infección, tales como la replicación y la liberación de nuevos viriones.

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