Congreso S.E.N.: Género y salud en nefrología

Es un aspecto importante que hay que tratar, con unas necesidades no cubiertas. Una sesión S.E.N., moderada por Marco Montomoli , en el 53 Congreso de la Sociedad Española de Nefrología , este lunes, trató Género y Salud Renal en Nefrología. ¿Por qué ahora? Marta Arias Guillén afirmó que no es nuevo a nivel mundial, pero sí en España, y por eso crearon el grupo de trabajo. " Si no se diferencia entre sexo y género, se pierde información ", sostuvo. Es necesario caracterizar las disparidades para mejorar los resultados. Lamentó que se está haciendo poco en este ámbito en comparación con otras sociedades científicas. Si se quiere tratar igual a los pacientes, hombres o mujeres, o del género que se sientan identificados, hay que estudiarlos por separado.

Sexo es lo biológico y no modificable. En género, el rol de cuidadora hace que se le dé menos importancia a ciertos síntomas y hace que se vaya menos al médico. En los hombres, peores hábitos alimenticios. En el género, " importa todo lo que nos rodea; dónde vivamos, en qué trabajamos ". Incluso, la altitud en la que se viva y la temperatura repercutirá en la salud renal. Las mujeres tienen menos percepción de tener enfermedad renal crónica, por lo que llegarán más tarde a consulta y tienen más riesgo de mortalidad . A lo largo de la enfermedad renal crónica, también hay diferencia entre sexos, desde el acceso. Las mujeres son más donantes que los hombres y reciben menos riñones a la hora de necesitar un trasplante renal. El que las personas trasgénero se sometan a hormonas tienen consecuencias renales. Hay que supervisar los tratamientos hormonales de cambio de sexo, " quizá haya que disminuir las dosis ". Los trasgénero cambian en la composición corporal y puede influir en el filtrado. En Europa, desde la facultad se comienza a hablar de las diferencias de género. Hay que incluir, a nivel de pregrado, alusiones a estas diferencias de género.

A nivel de investigación, tampoco se tiene en cuenta la perspectiva de género. Sólo se dice el número de hombres y de mujeres que hay, pero no cómo han respondido los hombres y cómo han respondido las mujeres a la duda planteada. Lo suyo es profundizar un poco más. Pidió abrir la mente y lanzó el reto de diferenciar por sexo y por género los estudios.

Por su parte; Iara Karlla da Silva Santos se enfocó más a la mujer y al embarazo. La enfermedad renal crónica afecta a 195 millones de mujeres en todo el mundo, pero " esos datos están infravalorados ". Aumenta el número de mujeres con obesidad y diabetes. Las niñas ya nacen con un 20% menos de nefronas que los niños. Las mujeres tienen más infecciones del tracto urinario. Una condición única de las mujeres es el embarazo . El propio embarazo puede hacer ascender la enfermedad renal crónica. La preeclampsia aumenta hasta 14 veces las opciones de tener enfermedad renal crónica. El médico de cabecera tiene que pedir la creatinina al menos una vez al año. Si se hace un adecuado asesoramiento previo y consejo pregestacional, se puede reducir el riesgo. Se dará la oportunidad de resolver las dudas a la pareja. La salud reproductiva es un derecho para todas las mujeres, tanto de las sanas como de las no sanas.

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