La terapia experimental CAR-T induce regresión en pacientes que ya habían agotado todas las demás opciones de tratamiento.
Investigadores del Centro de Investigación Oncológica Fred Hutchinson han comunicado los resultados de un ensayo clínico con linfocitos T portadores de receptores quiméricos del antígeno (CAR-T) en pacientes con leucemia linfocítica crónica. En la casi la totalidad de los 24 pacientes participantes el cáncer había progresado a pesar de haber ...
Investigadores del Centro de Investigación Oncológica Fred Hutchinson han comunicado los resultados de un ensayo clínico con linfocitos T portadores de receptores quiméricos del antígeno (CAR-T) en pacientes con leucemia linfocítica crónica. En la casi la totalidad de los 24 pacientes participantes el cáncer había progresado a pesar de haber sido tratado con ibrutinib, un fármaco recientemente aprobado, presentando la mayoría mutaciones que pronostican fracaso a las terapias actualmente en uso.
En 14 de 19 pacientes evaluados una única infusión de CAR-T indujo la regresión parcial o completa de la enfermedad en los ganglios linfáticos. En 17 pacientes con signos de leucemia en la médula ósea al inicio del ensayo, 15 quedaron libres de la enfermedad en esta localización, creciendo esta probabilidad con el número de CAR-T circulantes tras la infusión.
Los CAR-T utilizados en este ensayo reconocen el antígeno de superficie CD19 presente en las células leucémicas y han sido formulados siguiendo un protocolo que asegura la uniformidad de la población celular que será inyectada al paciente. Este método mejora la seguridad de este tipo de inmunoterapia y ayuda a establecer un vínculo entre dosis y eficacia, según indica Cameron Turtle (foto), hematólogo en el citado centro.