Un estudio en animales demuestra que la lorcaserina reduce la auto-administración de oxicodona y el relapso de la adicción.
Científicos de varios centros de investigación de los EE.UU. han descubierto que la lorcaserina, un agonista del receptor 5-HT2C autorizado en ese país para tratar la obesidad, reduce la auto-administración de oxicodona, un opiáceo de uso común. En ratas de experimentación la lorcaserina también inhibió las respuestas condicionadas que resultan ...
Científicos de varios centros de investigación de los EE.UU. han descubierto que la lorcaserina, un agonista del receptor 5-HT2C autorizado en ese país para tratar la obesidad, reduce la auto-administración de oxicodona, un opiáceo de uso común. En ratas de experimentación la lorcaserina también inhibió las respuestas condicionadas que resultan de aparear el consumo con estímulos medioambientales relacionados con éste.
La neurotransmisión por la vía de la serotonina, y particularmente a través de su receptor 5-HT2C, regula ambos fenómenos, lo que motivó el examen del efecto de la lorcaserina tanto en la abstinencia como en la re-exposición continuada. Los efectos de la lorcaserina pudieron ser revertidos por un antagonista de 5-HT2C. A las dosis utilizadas, la lorcaserina no alteró el comportamiento espontáneo. Los desórdenes relacionados con el uso de opiáceos son un problema de salud pública de primera magnitud en los EE.UU. y otros países desarrollados, por lo que los autores consideran que sus hallazgos podrían tener un importante impacto sanitario.
Kathryn Cunningham, directora del Centro de Investigación de Adicciones de la Universidad de Texas y co-autora del estudio, ya ha anunciado el inicio de nuevos estudios para clarificar de forma definitiva el potencial de la lorcaserina en la terapia de las adicciones.
Foto: Kathryn Cunningham / The University of Texas Medical Branch at Galveston