La ketamina se ha convertido en un foco de atención de la psiquiatría debido a su capacidad de estabilizar rápidamente a pacientes severamente deprimidos. Sin embargo, su uso se asocia a alteraciones de la memoria y de otras funciones cerebrales. Ahora, un estudio llevado a cabo en el Peter O´Donnell ...
La ketamina se ha convertido en un foco de atención de la psiquiatría debido a su capacidad de estabilizar rápidamente a pacientes severamente deprimidos. Sin embargo, su uso se asocia a alteraciones de la memoria y de otras funciones cerebrales. Ahora, un estudio llevado a cabo en el Peter O´Donnell Jr. Brain Institute ha dado a conocer que el bloqueo del receptor del N-metil-D-aspartato media el efecto antidepresivo inicial de la ketamina, el cual es prolongado por los metabolitos de la droga.
Sin embargo, este mecanismo de acción también es responsable de su efecto alucinógeno. Lisa Monteggia, profesora de nuerociencia en la citada institución, afirma que a pesar de este efecto adverso, la ketamina puede ayudar a pacientes en riesgo de suicidio en cuestión de horas, en contraste con el período de semanas necesario con otros antidepresivos.
A pesar de la elevada demanda que la ketamina tiene entre estos pacientes, siguen sin conocerse parámetros tan relevantes como la frecuencia de las infusiones y su duración. Es por ello que Monteggia ha iniciado 2 ensayos clínicos que evaluarán la posibilidad de usar un tratamiento nasal en lugar de intravenoso.
El resultado de estos ensayos podría tener importantes implicaciones para los pacientes en necesidad urgente de una terapia antidepresiva.