Las bacterias multirresistentes (BMR) son una amenaza de salud pública de primera magnitud. Así lo ha reconocido la Organización Mundial de la Salud, las Naciones Unidas y la propia Unión Europea. España ocupa el primer lugar del mundo en consumo de antibióticos sin ninguna razón epidemiológica que lo justifique, y ...
Las bacterias multirresistentes (BMR) son una amenaza de salud pública de primera magnitud. Así lo ha reconocido la Organización Mundial de la Salud, las Naciones Unidas y la propia Unión Europea. España ocupa el primer lugar del mundo en consumo de antibióticos sin ninguna razón epidemiológica que lo justifique, y uno de los primeros de Europa en infecciones por BMR, pero el impacto clínico de estas infecciones en nuestro país no era conocido hasta ahora.
Por ello, la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC) ha presentado los datos de un registro hospitalario de pacientes afectados por BMR en España, con la participación de 82 hospitales. Los resultados son contundentes: cada año, más de 35.000 personas con infecciones producidas por BMR pierden la vida. La presentación de este pionero estudio epidemiológico ha contado con la participación de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH), el Foro Español de Pacientes (FEP) y la Alianza General de Pacientes (AGP).
"Los resultados obtenidos obligan a poner en práctica con urgencia acciones para resolver este grave problema de salud que afecta a la población española", ha indicado el Dr. José Miguel Cisneros, presidente de la SEIMC. El registro, que estima la mortalidad cruda a los 30 días del diagnóstico de la infección, surge con el objetivo de conocer el impacto clínico real en una muestra representativa de hospitales de nuestro país de las infecciones por BMR, para facilitar la adecuada planificación de los recursos sanitarios.
El Dr. Julio García Rodríguez, portavoz de la SEIMC, ha resaltado que el estudio registró 903 pacientes con infección por BMR en una semana, de los cuales 177 (19,6%) fallecieron durante el primer mes del diagnóstico de la infección. Las infecciones más frecuentes han sido las producidas por bacilos Gram negativos, entre ellas las causadas por Escherichia coli con el mecanismo de resistencia de producción de betalactamasas de espectro extendido (BLEE) (233 pacientes), Pseudomonas aeruginosa multirresistente (103 pacientes) Klebsiella pneumoniae con BLEE (85 pacientes) y K. pneumoniae con resistencia a carbapenem (36 pacientes).
El Dr. Cisneros ha añadido que, de mantenerse los datos del estudio a lo largo del año y extrapolando los resultados al resto de hospitales del país, el número de pacientes con infecciones por BMR durante 2018 en España será de 180.600 y el número de fallecidos será de 35.400. Estas cifras representan que la mortalidad de los pacientes con infecciones por BMR en España es 30 veces superior a la de los accidentes de carretera, que fue de 1.200 fallecidos en 2017, según datos de la Dirección General de Tráfico.
Las demás sociedades científicas, la SEMPSPH y la SEFH, que trabajan junto con la SEIMC coordinadamente en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de las infecciones por BMR, y cuyos profesionales lideran los equipos multidisciplinares de control de infecciones y de programas de optimización de antimicrobianos, han hecho hincapié en la situación en la que se encuentra España que todavía carece de la especialidad de enfermedades infecciosas y la importancia de hacer frente con medidas serias y eficaces al problema de las resistencias bacterianas.
El Dr. Miguel Ángel Calleja, presidente de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), ha subrayado que "desde los Servicios de Farmacia Hospitalaria se colabora en la lucha contra las resistencias mediante la selección y posicionamiento de los antibióticos de mayor calidad, así como con la participación multidisciplinar diaria en el seguimiento de los pacientes y la promoción de la investigación en nuevos fármacos activos contra este tipo de bacterias. Pedimos a nuestras administraciones públicas una financiación adecuada para poder realizar estas actividades de vital importancia para mejorar la calidad de la asistencia así como una mayor incentivación de la investigación en nuevas moléculas activas contra las bacterias multirresistentes".
Mientras tanto, el portavoz de la SEMPSPH, el Dr. Ángel Asensio, ha subrayado que el control efectivo de las infecciones por BMR se centra primordialmente en el hospital, porque es allí donde las BMR encuentran el medio óptimo para su transmisión. Es en estas instituciones donde se concentran los pacientes portadores de BMR, más vulnerables a las infecciones (con enfermedades crónicas o graves y sometidos a una grado intenso de cuidados y manipulaciones de riesgo), y el uso más intensivo de antimicrobianos que facilita la selección de las BMR. Así, ha añadido que "evitar que los pacientes se contagien por BMR, o que desarrollen infecciones es una tarea crucial para mejorar la seguridad y la calidad de los servicios sanitarios". La mejora de los cuidados sanitarios necesita un número suficiente, y con la adecuada formación, de profesionales de control de la infección que promuevan de forma efectiva la aplicación de todo el conocimiento de que disponemos para atajar este problema. Disminuir el riesgo de infección, y de infección por BMR, necesita una mayor toma de conciencia tanto por las autoridades sanitarias como por los ciudadanos.
A pesar de esta grave situación, el Plan Nacional de Resistencias a los Antibióticos (PRAN), cuatro años después de su puesta en marcha, no cuenta con una asignación específica en los Presupuestos Generales del Estado. Por este motivo, el presidente de SEIMC, junto con las sociedades científicas y asociaciones de pacientes participantes, han exigido a las autoridades políticas y sanitarias central y autonómicas los recursos técnicos y humanos necesarios para hacer frente a este grave problema de salud pública, y que la financiación sea incluida explícitamente en los Presupuestos Generales del Estado, actualmente en fase de negociación.
Las asociaciones de pacientes, que han participado para poner de manifiesto el sufrimiento y mortalidad causadas por estas infecciones, han destacado la importancia de las acciones dirigidas a educar sobre los antibióticos y la prevención de infecciones.
El Dr. José Luis Baquero, vicepresidente y coordinador científico del Foro Español de Pacientes (FEP), ha incidido en "el necesario abordaje multidireccional del problema: la contención del abuso de antibióticos en explotaciones animales, la formación y las campañas de sensibilización sobre este problema, el desarrollo de diagnósticos precoces, nuevos tratamientos frente diferentes dianas, incentivo a la I+D, el fomento de la vacunación, el reconocimiento de la especialidad de Enfermedades Infecciosas (EI) y su formación reglada vía MIR, entre otras".
Otro de los aspectos claves de la lucha contra este problema es la disponibilidad de expertos en el ámbito del diagnóstico, prevención y tratamiento de las enfermedades infecciosas, incluidos los especialistas en enfermedades infecciosas como establece la propia Unión Europea en su plan de lucha contra las resistencias. "La ausencia de la especialidad de Enfermedades Infecciosas en nuestro país es una anomalía en comparación con el resto de los países desarrollados que dificulta la formación de estos expertos, así como su distribución suficiente y equitativa en el Sistema Nacional de Salud", ha destacado el Dr. Cisneros.
En este sentido, el presidente de la Alianza General de Pacientes (AGP), Antonio Bernal, ha insistido en la necesidad de la creación de la especialidad de EI para avanzar con las resistencias y equipararse al resto de países de la Unión Europea. "La urgencia de reconocer esta especialidad va inherente al abordaje de las resistencias bacterianas, que además se agrava con la falta de relevo generacional de esta especialidad, instaurada, por cierto, desde hace años en los hospitales españoles", ha señalado Bernal.
Asimismo, el Dr. Asensio ha añadido que en la actualidad España dispone de un insuficiente ratio de enfermeras de control de la infección, así como de una heterogénea formación de las mismas debido a la ausencia de una especialidad de enfermería del control de la infección, por lo que es necesario el desarrollo de esta especialidad así como la dotación de un ratio adecuado de personal.
El Dr. García Rodríguez también ha incidido en que, en el control de este problema, también es fundamental disponer de especialistas en Microbiología con la mejor formación, para lo que es esencial que la especialidad de Microbiología no disminuya su período formativo efectivo con su posible integración en la troncalidad del laboratorio.
Por todas estas razones, la SEIMC ha exigido a la Ministra de Sanidad que mantenga la especialidad de Microbiología fuera del proceso de troncalidad del laboratorio, y que cumpla con el mandato del Congreso de los Diputados que, en noviembre de 2017, le instó a crear la especialidad de Enfermedades Infecciosas, con los votos a favor del PP, PSOE, Ciudadanos, ERC, PNV, Grupo Mixto y ni un solo voto en contra. Además, la Unión Europea, en el informe del European Center for Diseases Prevention and Control (ECDC) publicado en enero de este año, recomendó la creación de la especialidad de EEII específicamente para mejorar los resultados de la lucha contra las BMR.