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Trumenba® amplía el arsenal disponible para luchar frente al meningococo B

Los especialistas en pediatría reunidos en la IV edición del Campus Vacunas, organizado por Pfizer en el marco del 66 Congreso de la AEP, han señalado que los niños mayores y los adolescentes son un grupo importante para la vacunación frente a esta infección.

12/06/2018

Especialistas en Pediatría han debatido las principales novedades que se han producido en el último año en el campo de la vacunología en España durante el Campus Vacunas organizado por Pfizer en el marco del 66 Congreso de la Asociación Española de Pediatría (AEP), celebrado en Zaragoza. El aumento del ...

Especialistas en Pediatría han debatido las principales novedades que se han producido en el último año en el campo de la vacunología en España durante el Campus Vacunas organizado por Pfizer en el marco del 66 Congreso de la Asociación Española de Pediatría (AEP), celebrado en Zaragoza. El aumento del arsenal disponible para luchar frente al meningococo y la necesidad de mejorar la concienciación sobre la vacunación del niño mayor en Pediatría de Atención Primaria han sido dos de los temas centrales del encuentro.

Los expertos han señalado que los niños mayores y los adolescentes son un grupo importante para la vacunación frente al meningococo, tanto por el número de infecciones causadas por este microorganismo a estas edades como por su letalidad. "En Europa, según datos de 2017 del European Center for Disease Prevention and Control, la tasa más alta de mortalidad por enfermedad meningocócica se da en pacientes de 15 a 24 años. Para esta franja de edad, la letalidad es del 13,5%", ha destacado el doctor Fernando Sánchez Perales, jefe de Servicio de Pediatría del Hospital de Torrejón (Madrid).

Sin embargo, según se ha expuesto durante el encuentro, tanto padres como el propio colectivo médico bajan un poco la guardia sobre la necesidad de la vacunación a medida que el niño se hace mayor. "En los primeros 2 años de vida, se agrupan el 90% de las vacunas que tiene que recibir un niño. A partir de esa edad, disminuye el número de vacunas que se ponen y da la sensación de que el niño ya está protegido de todo. No es cierto, las vacunas son para todas las edades", ha señalado el doctor Sánchez Perales.

Trumenba, diseñada para ofrecer amplia cobertura frente al meningococo B

La reciente llegada a las farmacias españolas de Trumenba, vacuna frente al meningococo B, ha sido una de las novedades abordadas por los pediatras durante este foro. Indicada para la inmunización activa de individuos de 10 años de edad y mayores, la vacuna está diseñada para ofrecer amplia cobertura frente a diversas cepas del meningococo B.

"La vacuna contiene dos variantes de la proteína fHbp que se expresan en más del 90% de los meningococos B, con lo cual se prevé que pueda tener una eficacia alta en la prevención de esta infección", ha afirmado el doctor Valentí Pineda Solas, de la Unidad de Infecciosas pediátricas de la Corporación Sanitaria Parc Taulí de Sabadell (Barcelona).

Trumenba es la única vacuna frente al meningococo B que contiene una variante de cada una de las dos subfamilias de fHbp, A y B, lo cual asegura una respuesta de anticuerpos frente a cepas que expresen cualquiera de las dos subfamilias. Además, tiene un perfil de seguridad basado en 11 ensayos clínicos realizados en más de 15.000 sujetos de 10 años de edad y mayores.

El segundo pico de incidencia de la enfermedad meningocócica

Asimismo, respecto a la edad para la que está indicada la nueva vacuna, durante el encuentro se ha destacado que entre los 14 y 18 años se produce el segundo pico de incidencia de la enfermedad meningocócica. "El estilo de vida del adolescente, de contacto íntimo, determinaría un grupo de riesgo claro a estas edades", ha indicado el doctor Pineda.

El meningococo se transmite de persona a persona a través del contacto con las secreciones respiratorias o de la garganta de portadores asintomáticos o, excepcionalmente, por contacto directo con pacientes con enfermedad meningocócica. Por ello, según se ha expuesto, el contacto estrecho que se da durante la adolescencia en alojamientos compartidos, residencias universitarias o en campamentos favorecería la transmisión de esta enfermedad.

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