Aunque siempre ha estado asociado con la pubertad y la adolescencia, la prevalencia del acné ha aumentado entre los adultos y, de manera especial, entre las mujeres. Diferentes estimaciones indican que un 45% de las mujeres siguen mostrando signos de acné pasados los 20 años de edad, un 26% entre ...
Aunque siempre ha estado asociado con la pubertad y la adolescencia, la prevalencia del acné ha aumentado entre los adultos y, de manera especial, entre las mujeres. Diferentes estimaciones indican que un 45% de las mujeres siguen mostrando signos de acné pasados los 20 años de edad, un 26% entre los 20 y los 30 años y un 12% entre los 30 y 40 años, disminuyendo significativamente a partir de los 45 años.
Son cifras puestas sobre la mesa por la doctora Aurora Guerra, jefa de Sección del Servicio de Dermatología del Hospital 12 de Octubre de Madrid, durante las IV Jornadas en Dermatología para Atención Primaria de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG) que se celebran en Ávila los días 15 y 16 de junio.
La dermatóloga -que ha sido la encargada de profundizar en estas Jornadas en el tratamiento del acné desde el primer nivel asistencial- señala que, por experiencia propia, cada vez hay una mayor tasa de mujeres adultas que tienen acné, que puede ser hasta los 45 años. "Mujeres que incluso no han tenido acné en su adolescencia y que les aparece a partir de los 20 años de edad". La Dra. Guerra apunta que, aunque puede deberse a su forma de vida (estrés), "lo que sí está claro que influye es un desequilibrio hormonal que a veces no se ha diagnosticado previamente". Así mismo, muchas de las pacientes con acné tienen un ovario poliquístico o son fumadoras.
En el tabaco hay que hacer una mención especial, según la experta, porque "influye muchísimo". En este sentido, señala que los adolescentes que fuman tienen un acné más persistente que los que no fuman y esto tiene una relación directa con las enfermedades de obstrucción folicular, como la hidradenitis.
El tratamiento que hay que emplear en estas pacientes adultas con acné es suspender el tabaco, en el caso de que fumen, y posteriormente utilizar anticonceptivos adecuados y regular ese desequilibrio hormonal. "Generalmente, con anticonceptivos con acción antiandrogénica, además de los tratamientos tópicos que ya conocemos. Pero la mayor parte de las veces necesita un tratamiento hormonal que regule esa situación". Guerra advierte que a veces se acompaña de hirsutismo (vello excesivo) y un pequeño grupo que también inicia una alopecia androgenética.
Según la experta, el acné es un proceso que se resuelve con facilidad, con los tratamientos que tenemos, salvo en aquellos casos en los que hay algo añadido como, por ejemplo, la resistencia a la insulina, el ovario poliquístico, el tabaco y otros síndromes autoinflamatorios. Tal y como dejó patente la dermatóloga en Ávila, el médico de familia debería diferenciar, por una parte, el acné vulgar, sin complicaciones; y aquellas otras formas clínicas que tienen una evolución tórpida o en las que sospechamos una resistencia a la insulina o una alteración hormonal, en las que ya hay que emplear otras medidas.
Otras materias del encuentro
Además del manejo del acné, las IV Jornadas de Dermatología en Atención Primaria de la SEMG han realizado un repaso por otros temas de interés para los médicos que trabajan en el primer nivel, como por ejemplo, las urgencias dermatológicas y cuándo se debe derivar al paciente; la comorbilidad y Dermatología en la consulta de AP y lo que esconden las enfermedades de la piel; así como la innovación en el diagnóstico dermatológico para AP, centrándosela en la dermatoscopia y la biopsia cutánea. Entre los talleres prácticos, destaca el titulado "¿Doctor que me pasa en el pelo y las uñas?" en el que se analizarán casos prácticos en tricología y patología ungueal.