La gripe puede suponer hasta 100 visitas de niños al día a la consulta del pediatra en la Comunidad Valenciana, según datos de la Sociedad Valenciana de Pediatría (SVP). Ante la proximidad de alcanzar el pico de epidemia de gripe anual en esta comunidad, los pediatras valencianos recuerdan que su tratamiento se basa en el control de los síntomas con analgésicos y en dejar que el organismo del niño controle la enfermedad en cinco días. Por otro lado, advierten que la fiebrefobia hace que muchos padres acudan en masa a urgencias, sin que exista necesidad urgente, lo que puede saturar los hospitales o centros de salud, un problema creciente en la Comunidad Valenciana. Tan solo se recomienda que, en caso de empeoramiento del estado general, somnolencia excesiva, vómitos que no ceden, fiebre que dura más de cinco días o dificultad respiratoria, el menor sea evaluado por su pediatra para descartar complicaciones.

La incidencia de gripe en niños superó en 2018 las cifras de 500 casos por 100.000 en las dos últimas semanas de enero en donde se produjo el pico de incidencia de la epidemia anual. "Se trata de una cifra significativa que en algunos casos puede suponer una media de unas 50 o 60 visitas al día e incluso en algunos llegar a las 100 en días muy concretos. Cuando lo que estamos pidiendo es limitar las visitas a 25 niños por pediatra al día", subraya la doctora Mara Garcés, miembro de la Junta Directiva de la SVP. Se trata de la enfermedad que mayor grado de saturación produce en las consultas de pediatría, según estimaciones de la SVP. "El niño en edad escolar es el primero que se infecta y es quien transmite el virus al resto de la población", indica la doctora. De ahí que las cifras de incidencia en gripe en los niños superen en cinco veces las que se producen en el resto de la población, lo que conlleva que durante dos o tres semanas incluso lleguen a triplicarse las consultas por este motivo.

La gripe suele manifestarse en los niños con fiebre elevada, cercana a los 40 grados, dolor de cabeza y corporal, en forma de mialgias, falta de apetito, dolor de garganta, tos y escalofríos. "Es una enfermedad muy contagiosa que, por lo general, se traspasa a través del aire debido a la tos y los estornudos, de ahí que los niños sean los más vulnerables pues en ellos las vías de contagio son más difíciles de evitar", comenta la doctora Garcés. Su tratamiento se basa en controlar los síntomas con analgésicos y dejar que el propio organismo del menor controle la enfermedad en cinco días.

Cuándo acudir a urgencias

La fiebre "suele generar un cierto grado de ansiedad en las familias, lo que, en muchas ocasiones, acaba saturando tanto las urgencias pediátricas como las consultas de Atención Primaria", explica la doctora Garcés. En este sentido, hay que tener en cuenta que la fiebre es común en la gripe y que responde ante los analgésicos. Así, "es normal que el niño mantenga temperaturas que no bajen de 37,5-38 grados a pesar de la medicación. Si se trata de un niño sano, sin enfermedades asociadas, que mantiene un buen estado general a pesar de la fiebre, no es necesario acudir a urgencias", asegura. Ante un empeoramiento del estado general, somnolencia excesiva, vómitos que no ceden, fiebre que dura más de 5 días o dificultad respiratoria, "sería conveniente que el niño sea evaluado por su pediatra para descartar complicaciones", añade.

Los pacientes de mayor riesgo son sobre todo los menores de 1 año, "que por su condición de inmunidad más inmadura tienen mayor riesgo de complicaciones y son a los que los pediatras prestamos más atención", apunta la doctora Garcés. Por otro lado, la gripe predispone a mayor riesgo de enfermedades producidas por la bacteria neumocócica. "Por fortuna, casi todos los niños de nuestro país están vacunados frente a este patógeno, lo que los protege del riesgo de desarrollar neumonía u otitis, que son las complicaciones más frecuentes en niños", sostiene.

Cómo prevenir la gripe en niños

Desde la SVP se recuerda que la vacunación es el único modo de prevenir la enfermedad de la gripe. De hecho, según un estudio reciente publicado en la Revista Española de Salud Pública, se concluye que los programas de vacunación para la prevención de la gripe estacional en niños en edad escolar (3-16 años) son una estrategia rentable. Por todo ello, el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (AEP) recomienda la vacunación antigripal en niños con patología crónica que tienen más riesgo de enfermedad grave, como asmáticos, diabéticos, cardiópatas, etc., y la aconseja en todo niño que quiera vacunarse.

En este sentido, también es importante la vacunación de los profesionales sanitarios. "Los pediatras son los que más se vacunan de la gripe, además de para su propia protección, para evitar transmitir la enfermedad a sus pacientes", concluye la doctora Garcés.