Las observaciones llevadas a cabo por dos equipos de investigación, uno de ellos liderado por científicos de la Universidad de Navarra (UN), indican que el consumo elevado de productos alimentarios ultra-procesados aumenta un 23% el riesgo de sufrir eventos cardiovasculares y en hasta un 62% la mortalidad por cualquier causa. En ...
Las observaciones llevadas a cabo por dos equipos de investigación, uno de ellos liderado por científicos de la Universidad de Navarra (UN), indican que el consumo elevado de productos alimentarios ultra-procesados aumenta un 23% el riesgo de sufrir eventos cardiovasculares y en hasta un 62% la mortalidad por cualquier causa.
En el primer estudio fueron monitorizados a lo largo de casi 6 años más de 105.000 individuos que al inicio no presentaban ninguna enfermedad cardiovascular. En los 4 grupos establecidos se constató que el de mayor consumo vio aumentado su riesgo de enfermedades circulatorias y de ictus un 18 y un 23%, respectivamente. Estos valores fueron obtenidos tras corregir factores con potencial de interferencia, tales como la edad, formación académica y nivel de actividad física, según afirma Bernard Srour, científico en el Centro de Investigación de Epidemiología y Estadística la Universidad de París y director del estudio. El estudio de la UN evaluó casi 20.000 graduados académicos a lo largo de 15 años, hallando una relación lineal entre el consumo y el riesgo de muerte por cuaque causa. En la totalidad de la población examinada el riesgo aumentó un 18% por cada ración adicional.
Los estudios no establecen ninguna relación causal entre consumo y riesgo, ya que, según los autores, existe una multiplicidad de factores que pueden influenciar esta asociación.