La eHealth es un concepto relativamente nuevo que supone un cambio de paradigma en el manejo de la salud. Y es que no solo implica un cambio en el modelo asistencial en la salud, tanto pública como privada, sino que también está transformando la relación entre profesionales de la salud y ciudadanos. Es en este contexto en el que desde los estudios de Ciencias de la Salud de la UOC organizan jornadas como plataformas de intercambio de conocimiento, como el evento "eWellbeing UOC Talks: Alimentación, actividad física y eHealth", que organizaron en colaboración con el eHealth Center de la UOC. En ella, un amplio panel de expertos analizó el uso de la tecnología como una aliada para ayudar a mejorar los hábitos de vida, ya sea en alimentación o en actividad física. Además, se trataron temas como el uso de aplicaciones móviles para ayudar a modificar hábitos y permitir un tratamiento más individualizado, una mayor accesibilidad a recomendaciones personalizadas y una mayor interacción.

Ventajas de la eHealth

Los beneficios de la salud digital para la promoción de la salud son cada día más numerosos. Algunas de las principales ventajas son:

• Ayuda a adquirir hábitos más saludables. Las nuevas tecnologías están cambiando la manera en que nos cuidamos: registrando las calorías que ingerimos, controlando el ejercicio físico que hacemos o monitorizando nuestro sueño y frecuencia cardiaca. Como explica la Dra. Carme Carrion, directora del Máster Universitario en Salud Digital de la UOC, en personas sanas "las apps, los sensores o la realidad virtual nos pueden ser de gran ayuda en el cambio de hábitos, ya que, en caso de que las intervenciones estén bien diseñadas, permiten introducir estrategias que nos hacen más fácil el cambio de hábitos de modo que tengamos estilos de vida más saludables". Además, en el ámbito de la alimentación "las Tecnologías de Información y la Comunicación (TICs) pueden plantearse como alternativa o método complementario para la promoción de la salud y entre ellos la promoción de hábitos alimentarios saludables", apunta la Dra. Alicia Aguilar, directora del Máster Universitario en Nutrición y Salud de la UOC.

• Mejora la gestión de la condición de salud. El uso de la salud digital aplicada a la salud también beneficia a los pacientes con una enfermedad crónica o patología concreta, pues "proporcionan un mejor conocimiento y gestión de nuestra condición de salud", comenta Carrion, a la vez que empodera en el manejo de la condición de salud.

• Optimiza las recomendaciones nutricionales en la práctica de actividad física en deportistas. La eHealth ofrece un gran potencial a la hora de educar y cambiar el comportamiento de los deportistas o personas activas. Así, en palabras de la Dra. Anna Bach, directora del Máster Universitario en Alimentación en la Actividad Física y Deporte de la UOC, "las apps para teléfonos inteligentes y otros servicios de asistencia técnica incorporan el uso de un registro de alimentos basado en imágenes y la funcionalidad de redes sociales para proporcionar comentarios personalizados en la aplicación a individuos o grupos, apoyo entre pares y una plataforma para entregar material educativo sobre nutrición". Por otra parte, estas nuevas tecnologías también permiten "mejora la adherencia a las recomendaciones alimentarias proporcionadas por parte de los profesionales, y más si a partir de este medio deportista y experto en nutrición deportista pueden interaccionar".

• Identificar intervenciones óptimas. La llegada de la eHealth también afecta al manejo de las enfermedades por parte de los profesionales de la salud, que encuentran en las TICs una ayuda que "permite poder identificar con mayor facilidad las intervenciones óptimas para cada usuario, al tiempo que se está monitorizando el estado de salud de forma continuada y no solo en momentos puntuales", sostiene la Dra. Carrion. Así, su uso "facilitará la prevención y detección temprana de enfermedades, apoyará a los profesionales en el diagnóstico de la enfermedad, será una herramienta para identificar nuevos indicadores en la evolución de la salud de la población, valorizará la adherencia y resultado de los tratamientos y agilizará procesos de investigación en salud por las capacidades inherentes a estas tecnologías", señala José Manuel Chao Ardao, socio-director de Plexus.

• Empodera al ciudadano. Con todo, el papel del ciudadano respecto a su salud también está cambiando. En este sentido, comenta José Manuel Chao Ardao que la "SmartSalud es un en- foque innovador para facilitar una experiencia 360 del paciente/ ciudadano, incorporando tecnologías avanzadas que aumenten el empoderamiento del paciente/ciudadano, faciliten el acceso a los servicios sanitarios, permitan una mejor interacción entre el profesional y el paciente, en definitiva un mejor conocimiento de las necesidades y demandas actuales y futuras de la población". Por su parte, la Dra. Alicia Aguilar considera que "la facilidad de manejo, su ubicuidad y, en el caso de las apps, las posibilidades de acceso y control personal de datos, junto a las posibilidades de interacción que ofrecen son aspectos que van muy alineados con las nuevas estrategias que buscan empoderar al ciudadano implicándolo en el cuidado de su salud".

• Ayuda a compartir nuestra alimentación. La interacción entre la tecnología y la gastronomía también aporta un valor añadido al acto de comer. "La comida siempre ha sido un acto social. Quedamos para comer. Comemos si puede ser con gente. Es algo que va más allá de la mesa. Por tanto, más que fotografiar el plato, ahora se busca una nueva manera de compartir nuestra alimentación", puntualiza el antropólogo y director de la Cátedra Alimentación, Cultura y Sociedad de la UOC, Dr. Xavier Medina.

Limitaciones de la eHealth

Si bien, pese a las grandes ventajas que ofrece la eHealth, no es oro todo lo que reluce. Por eso, debido al gran desarrollo que ha experimentado en los últimos años, es necesario crear un marco legislativo y un ajuste de lo que lasTICs pueden ofrecer para que el ciudadano pueda ejercer adecuadamente el derecho de acceso a sus datos de salud y disponer de tecnologías fiables y seguras que contribuyan al manejo de su condición y la promoción de estilos de vida saludables. Además, no se puede olvidar la ciberseguridad, ya que, como indica José Manuel Chao Ardao, "con el avance tecnológico evidentemente los riesgos crecen, pero la prevención y la aplicación de recursos a la ciberseguridad también es un reto, ya identificado por la Comisión Europea, tanto en profesionales suficientemente formados en el ámbito europeo como las consideraciones a aplicar ante el despliegue de todas estas nuevas tecnologías". Advierte, también, la Dra. Carme Carrion que "las limitaciones con las que se encuentra la implementación de las soluciones digitales en el campo de la salud radican aún en la poca confianza que generan algunos profesionales y ciudadanos, la resistencia al cambio de las organizaciones sanitarias, a las inversiones iniciales que conllevan y a la falta de suficientes estudios de calidad que aporten evidencias suficientes para avalar su eficacia y seguridad".

Sea como fuere, la nueva era tecnológica es una gran oportunidad para el sector, y la salud digital, usada éticamente, está llena de oportunidades para la promoción de la salud.

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