Un estudio realizado en más de 22.000 individuos sanos o con enfermedades cardíacas congénitas (ECCs) revela en este último grupo un riesgo más de dos veces superior de sufrir cáncer. De los pacientes con ECCs que fueron sometidos a una intervención quirúrgica cardíaca antes de los 41 años el riesgo ...
Un estudio realizado en más de 22.000 individuos sanos o con enfermedades cardíacas congénitas (ECCs) revela en este último grupo un riesgo más de dos veces superior de sufrir cáncer. De los pacientes con ECCs que fueron sometidos a una intervención quirúrgica cardíaca antes de los 41 años el riesgo de cáncer aumentó un 95%, mientras que en ausencia de cirugía el riesgo fue un 143% mayor, en comparación con los controles.
En las 3 cohortes establecidas en función de los años de nacimiento el riesgo fue máximo en la más reciente, correspondiente al período entre los años 1990 y 1993, sin que se detectaran diferencias significativas entre hombres y mujeres. Los pacientes con defectos conotruncales también exhibieron un riesgo superior. Zacharias Mandalenakis, investigador en el Departamento de Medicina Clínica y Molecular de la Universidad de Gotemburgo y director del estudio, afirma que este aumento de riesgo podría ser consecuencia de la reducida actividad física en las personas con alteraciones cardíacas, lo que repercutiría en una peor función muscular y reducción de la oxigenación.
Esta hipótesis es consonante con la recomendación de la Sociedad Oncológica Estadounidense, según la cual la actividad física tiene un efecto protector frente a la aparición de tumores.