Científicos de diversos centros de investigación suizos han descubierto que el bloqueo de la angiopoyetina (Ang)-2 y del VEGF-A, dos factores pro-angiogénicos que contribuyen a la progresión del cáncer, induce un efecto pleiotrópico inmunológico que potencia la efectividad de la inmunoterapia con anticuerpos anti-CD40. Según afirma Abhishek Kashyap, científico en el ...
Científicos de diversos centros de investigación suizos han descubierto que el bloqueo de la angiopoyetina (Ang)-2 y del VEGF-A, dos factores pro-angiogénicos que contribuyen a la progresión del cáncer, induce un efecto pleiotrópico inmunológico que potencia la efectividad de la inmunoterapia con anticuerpos anti-CD40.
Según afirma Abhishek Kashyap, científico en el Hospital Universitario de Basilea y director del estudio, la inhibición simultánea de Ang-2 y VEGF-A por sí sola induce la regresión de la vasculatura tumoral, y reduce la proporción de vasos no perfundidos y la permeabilidad de los restantes. Sin embargo, en combinación con los anti-CD40 promueven de manera sinérgica un sesgo en la diferenciación de los macrófagos hacia un fenotipo pro-inflamatorio y aumentan la activación de las células dendríticas en el microentorno tumoral. A estas acciones beneficiosas se añade la rápida infiltración y distribución intratumoral de los linfocitos T CD8+ citotóxicos, prosigue Kashyap. La sinergia no redundante observada con esta nueva combinación mejora la capacidad efectora de los linfocitos T, lo que conduce a un mejor control del crecimiento tumoral.
A pesar del éxito que la inmunoterapia tiene en una proporción de pacientes, la mayoría de ellos sigue sin responder apropiadamente, lo que hace imperativo identificar nuevas combinaciones que aumenten su eficiencia, resumen los investigadores.