Imaginemos que tenemos un paciente polimedicado extremo. ¿Qué debemos hacer? ¿Cuánto tiempo le dedicas? ¿Cómo hacer que cumpla su rutina de medicamentos? Estas son algunas de las preguntas que han surgido en la mesa debate sobre el `Abordaje multidisciplinar de la cronicidad: ¿qué tenemos que hacer para integrar a todos ...
Imaginemos que tenemos un paciente polimedicado extremo. ¿Qué debemos hacer? ¿Cuánto tiempo le dedicas? ¿Cómo hacer que cumpla su rutina de medicamentos? Estas son algunas de las preguntas que han surgido en la mesa debate sobre el `Abordaje multidisciplinar de la cronicidad: ¿qué tenemos que hacer para integrar a todos los agentes de la salud?´.
Desde el punto de vista del paciente, Manuel Arellano, vicepresidente de la Plataforma de Pacientes y coordinador del grupo de Cohesión autonómica y Representante en Europa en el Foro Europeo de Pacientes, ha afirmado que debemos "priorizar la seguridad del paciente" a través de cuatro elementos clave: continuidad asistencial, saber si una medicación es compatible con otra, empoderar y formar pacientes activos y que todo el proceso esté integrado en lo sociosanitario. "El problema es que muchas veces no le preguntamos al paciente cuándo puede o cuándo quiere tomar la medicación", ha lamentado Arellano. Asimismo, aconseja a los farmacéuticos que organicen esos 13, 15 o 18 medicamentos que se toma al día un paciente. Por otra parte, el vicepresidente ha destacado la importancia de que exista una tarjeta que acumule toda la información historia de los medicamentos.
Y en esa misma línea ha hablado Rafael Manuel Micó, secretario general de la junta directiva nacional de SEMERGEN, quien ha puesto el punto de vista médico a este caso. "A un polimedicado extremo, hay que dedicarle más tiempo, por ello, se le haría una analítica, un control semestral, exploraciones…", ha declarado Manuel.
Laura Almudéver, doctora en Enfermería y coordinadora de la revista de Enfermería integral del Colegio Oficial de Enfermería de Valencia, ha puesto el foco en el área de enfermería. Almudéver considera imprescindible que haya una muy buena atención. "Cuando es una primera visita, hay que crear un clima de confianza, hacer que se sienta cómodo/a, valorar su historial clínico, sus antecedentes, escuchar activamente, hacer exploraciones físicas y dar consejos de autocuidados. Con todo ello, pretendo mejorar su calidad de vida", ha destacado la doctora. En otro sentido, Almudéver ha lanzado una propuesta nacional en la que sea el farmacéutico quien pueda hacer una revisión de medicamentos o tomarle la tensión en una atención domiciliaria a pacientes.
"Este paciente no se toma todos los medicamentos, y eso ya es un problema porque no está controlado", ha enfatizado Jesús Carlos Gómez, presidente de la Fundación SEFAC. Gómez ha indicado cuál el punto de vista farmacéutico, nada fácil por cierto. Y es que estos no tienen el historial clínico del paciente y es muy difícil ayudarles al cien por cien como el resto de agentes. A pesar de ello, el presidente ha indicado que él primero se fija en la dispensación, luego en si hay adherencia o no, la conciliación y revisión de su medicación y la nutrición. "Pero lo más importante es que nunca debemos perder de vista el seguimiento con un paciente", ha aconsejado Gómez.