El principal objetivo de la Sociedad Española de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene (SEMPSPH) es impulsar la especialidad a través del desarrollo de diferentes líneas estratégicas de trabajo, que empiezan por mejorar la imagen de la Sociedad, visibilizando su utilidad no solo para los profesionales dedicados a la Medicina Preventiva y la Salud Pública, sino también para la mejora del Sistema Sanitario, con el objetivo final de que ello redunde en la salud de la población.

Hablamos con Rafael Manuel Ortí Lucas, presidente de la SEMPSPH, quien nos explica que "estamos trabajando en la elaboración de guías y protocolos, y en la revisión continua de algunas ya realizadas, para que los socios puedan utilizarlas para el desarrollo de su trabajo diario. El fomento de la formación de calidad y específica de la especialidad entre los profesionales, así como de la educación en salud para los ciudadanos, son otros de los grandes objetivos que tiene actualmente la SEMPSPH, junto con el de mejorar la situación laboral de la especialidad".

Se trata de una especialidad que trabaja en la vigilancia, prevención y control de IRAS, en higiene, desinfección y esterilización, en actividades relacionadas con los cuidados (UPP, caídas, flebitis, cateterismo, etc.), en medicina preventiva clínica (vacunas, prevención del tabaquismo y otros problemas de Salud Pública), en educación sanitaria, en la mejora de la calidad asistencial, en el fomento de la seguridad del paciente, la promoción de la salud, la gestión y administración sanitaria, entre otras muchas actividades propias de su área.

Reivindicaciones

A raíz de la actual situación de alerta sanitaria que está viviendo nuestro país por la pandemia de la Covid-19, se ha puesto aún más en evidencia una situación que históricamente vienen denunciando los profesionales de Medicina Preventiva, la necesidad de reforzar los servicios hospitalarios de esta especialidad.

Al respecto, el presidente afirma que "la cartera de servicios incluida en nuestra especialidad es de las más amplias, por lo que necesitamos que las unidades hospitalarias de Medicina Preventiva estén adecuadamente dotadas de personal para poder abordarlas todas con eficacia y eficiencia. Hay hospitales con un número elevado de camas que solo cuentan con un preventivista. Es imposible que un único profesional asuma todas las funciones que debe realizar. Los servicios de Medicina Preventiva infradotados son un peligro para los profesionales y para los pacientes que se puede y se debe evitar". En este sentido, el papel de los equipos de Enfermería es crucial en la promoción, divulgación y control de medidas básicas como la higiene de manos o la etiqueta respiratoria en profesionales, pacientes, familiares y población en general, pero también en cuestiones más específicas para el personal sanitario como, por ejemplo, la puesta y retirada de los equipos de protección individual, lo cual repercute directamente en su seguridad.

Sostenibilidad

El asunto de la sostenibilidad de nuestro sistema sanitario es un tema que lleva mucho tiempo encima de la mesa, y se hace más relevante que nunca en tiempos en los que nos vemos azotados por una situación de emergencia sanitaria sin precedentes, que ha puesto al límite el sistema y aún no sabemos dónde llegará. En este contexto, es previsible que haya que replantearse muchas cuestiones esenciales con respecto a la mencionada sostenibilidad. Y en ese sentido la especialidad de Medicina Preventiva, Salud Pública e Higiene tiene mucho que aportar y decir.

Tal y como recuerda Ortí, "la prevención y control de IRAS, la mejora en la higiene, la desinfección y esterilización, el fomento de la educación sanitaria y la promoción de la salud, por citar solo algunas áreas de nuestro trabajo, evitan millones de enfermedades cada año, con el consiguiente ahorro del gasto que suponen pruebas diagnósticas, tratamientos, hospitalizaciones, intervenciones... Prevenir enfermedades es más costo-efectivo que el tratamiento de las mismas". También manifiesta que la Medicina Preventiva, en momentos como el que se está viviendo, en el que el sistema se encuentra completamente sobrepasado, aporta soluciones fundamentales a tener en cuenta. "Ya lo ha estado haciendo y lo continúa haciendo. Desde los servicios de Medicina Preventiva se ha tratado de evitar la situación de sobrecarga con la elaboración de los protocolos de trabajo, con la formación de los profesionales de otros servicios, con el seguimiento estrecho de los contactos de los casos para evitar la propagación del virus…"

Perspectivas

Nos encontramos inmersos en plena crisis sanitaria, y la búsqueda de soluciones y aportaciones que puedan colaborar en su gestión es lo prioritario. Se trata de una situación, obviamente, en la que las autoridades intentan tomar las decisiones más adecuadas, teniendo en cuenta la valoración de riesgos, los consejos de los expertos y la experiencia de otros países, aunque no hay certezas porque se trata de algo que desborda cualquier tipo de previsión.

Preguntado por su valoración con respecto a la gestión de la crisis, el presidente de la SEMPSPH manifiesta que "habrá un momento mejor que el actual para valorar si se está gestionando bien o no esta pandemia. Pero si es relevante tener presente que no se puede hacer una valoración general de la gestión. El impacto de la Covid-19 no está siendo el mismo en todas las autonomías y habrá que analizar cada caso concreto para ver por qué está sucediendo eso y si se debe o no al impacto de las medidas y a una mejor o peor gestión de los recursos".

Algo en lo que muchos especialistas, y en general la sociedad, coincidimos, en que habrá que replantearse numerosos cambios en el estilo de vida y las prioridades, siendo la prevención uno de los aspectos que pasen a tener mucha más importancia que antes de esta hecatombe. Ortí espera que esto suceda, ya que en su opinión "la prevención debe estar situada en la cúspide del sistema sanitario. Hay que hacer realidad el conocido refrán "más vale prevenir que curar"; y eso conlleva una mayor inversión en Salud Pública".