La calidad del aire es uno de los factores que más contribuyen a la mortalidad por enfermedades respiratorias y tan solo en España, donde 10.000 personas fallecen al año por esta causa. Estudios recientes apuntan que existe una significativa asociación entre la contaminación del aire con altos niveles de NO2 ...
La calidad del aire es uno de los factores que más contribuyen a la mortalidad por enfermedades respiratorias y tan solo en España, donde 10.000 personas fallecen al año por esta causa. Estudios recientes apuntan que existe una significativa asociación entre la contaminación del aire con altos niveles de NO2 y la expansión de la pandemia de Covid-19, que aunado a otros factores de riesgo -como la edad, la hipertensión, la diabetes o las cardiopatías- pueden contribuir a la mortalidad por esta infección.
El pasado 17 de julio, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico presentó el Informe de Evaluación de la Calidad del Aire en España, en el cual se muestra la evolución de los niveles de contaminación del aire desde 2009 hasta el año pasado. De acuerdo con los datos, el Indicador Medio de Exposición (IME), que se emplea para evaluar el cumplimiento del objetivo de reducción de la exposición de las partículas más finas, se situó en 2019 en un nivel 14,89%, por lo que se cumplió el objetivo establecido de 15%.
En lo que respecta a otros contaminantes, a excepción del Ozono (03), cuyos valores registrados estuvieron por encima del objetivo, el dióxido de azufre (S02), el benzo(a)pireno (B(a)P), el monóxido de carbono (CO), el plomo (Pb), el benceno (C6H6), el arsénico (As) y el cadmio (Cd) también evolucionaron evolución en armonía a los objetivos propuestos.
Otro aspecto digno de mención es que, de acuerdo con las informaciones de este Ministerio, durante los meses que duró el estado de alarma (de marzo a junio), se registró una mejora sin precedentes de los niveles de calidad del aire, especialmente en lo referente a dióxido de nitrógeno (NO2) y las partículas en suspensión en las estaciones urbanas y suburbanas de municipios con más de 200.000 habitantes, con una reducción media de 38%. Incluso, con caídas del 80% en los municipios de Alicante, Las Palmas de Gran Canaria, Vigo y Vitoria-Gasteiz. Esta reducción tan prominente tuvo su génesis en la disminución del tráfico rodado y de la producción industrial.
La Dra. Isabel Urrutia, neumóloga y coordinadora del Área de Medio Ambiente de SEPAR, afirma que "los expertos de SEPAR estamos satisfechos con los resultados del Informe del Ministerio, ya que indudablemente la mejora de la calidad del aire reduce la incidencia de las enfermedades respiratorias. Asimismo, es una buena noticia saber que los índices de contaminación han disminuido casi un 40% en los meses del estado de alarma, ya que de acuerdo con los primeros resultados de estudios realizados en Italia y en China, existe una correlación entre la contaminación del aire y la expansión de las epidemias como la de la pandemia del Covid-19".
Asimismo, un grupo de neumólogos de SEPAR está trabajando en un estudio global en España, que permitirá saber la interrelación entre la calidad del aire y la extensión de las epidemias, ya que como apunta, "creemos que mejorar la calidad del aire debe ser considerada como una prioridad para la prevención de situaciones epidemiológicas como la actual".
Para el Dr. Carlos A. Jiménez-Ruiz, neumólogo y presidente de SEPAR, "la vuelta a la normalidad es una oportunidad para todos para disminuir los niveles de contaminación y mejorar la calidad del aire, especialmente en las zonas urbanas. Creo que todos, como sociedad, debemos implicarnos en este sentido, con acciones concretas, especialmente en lo referente a la movilidad urbana, ya que de ello depende en buena medida nuestra salud respiratoria y pulmonar".