La dieta puede repercutir directamente en el microbioma intestinal que afecta directamente a las respuestas inflamatorias en el intestino, según un estudio de la Universidad de Groningen en los Países Bajos, y publicado en la revista ´Gut´ (BMJ). El estudio contempló la asociación entre 173 factores dietéticos y el microbioma de ...
La dieta puede repercutir directamente en el microbioma intestinal que afecta directamente a las respuestas inflamatorias en el intestino, según un estudio de la Universidad de Groningen en los Países Bajos, y publicado en la revista ´Gut´ (BMJ).
El estudio contempló la asociación entre 173 factores dietéticos y el microbioma de 1425 individuos en cuatro cohortes, incluidos individuos con enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa o síndrome del intestino irritable, y miembros de la población en general. La composición y función microbianas intestinales se perfilaron mediante secuenciación metagenómica de escopeta. Se utilizaron cuestionarios de frecuencia alimentaria para evaluar la ingesta dietética.
Los investigadores identificaron 38 asociaciones entre patrones dietéticos y grupos microbianos. En todos los individuos, 61 alimentos y nutrientes individuales se asociaron con 61 especies y 249 vías metabólicas (tasa de descubrimiento falso <0,05).
Los alimentos procesados y los derivados de animales se asociaron sistemáticamente con un mayor volumen relativo de especies bacterianas "oportunistas", incluidas ciertas bacterias pertenecientes a Firmicutes y Ruminococcus sp, y con una actividad proinflamatoria. Asimismo, comida rápida compuesto por carnes, patatas fritas, mayonesa y refrescos se asoció con un grupo de bacterias "poco amistosas" Clostridium bolteae, Coprobacillus y Lachnospiraceae en todos los participantes del estudio. Mientras, alimentos vegetales y pescado se relacionaron con especies bacterianas "amistosas" implicadas en la actividad antiinflamatoria.
"Los hallazgos sugieren respuestas compartidas de la microbiota intestinal y la dieta entre pacientes con enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, síndrome del intestino irritable y la población en general que pueden ser relevantes para otros contextos de enfermedad en los que la inflamación, los cambios microbianos intestinales y la nutrición son factores clave", indicaron los autores.