Un equipo de expertos del grupo de Investigación en Proteómica y Química de Proteínas y el Laboratorio de Neurofarmacología-Neurophar dirigidos por los investigadores de la UPF David Andreu y Rafael Maldonado ha desarrollado una familia de péptidos que permite que el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC), componente principal de cannabis sativa, combata el ...
Un equipo de expertos del grupo de Investigación en Proteómica y Química de Proteínas y el Laboratorio de Neurofarmacología-Neurophar dirigidos por los investigadores de la UPF David Andreu y Rafael Maldonado ha desarrollado una familia de péptidos que permite que el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC), componente principal de cannabis sativa, combata el dolor en ratones sin efectos secundarios. El grupo formado por investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona, la Universidad de Barcelona y la Universidad de Lisboa ha publicado los resultados del estudio en Journal of Medicinal Chemistry.
Actualmente, existen dos tipos principales de analgésicos que se prescriben en función de la severidad del dolor. Para tratar el dolor leve suelen utilizar antiinflamatorios no esteroideos (AINES, como el ibuprofeno o el paracetamol), mientras que para el dolor severo se utilizan opiáceos que, aunque efectivos, tienen un importante potencial adictivo. Entre esos extremos, existe una ventana terapéutica que no está cubierta: no existen fármacos seguros y eficaces para abordar cuadros de dolor crónico moderado , ni de tipo neuropático. El THC produce analgesia mediante su unión a los receptores cannabinoides de tipo 1 (CB 1). Sin embargo, estos receptores interaccionan con el receptor de serotonina 5HT 2A, y dicha interacción produce los problemas en la memoria en presencia de THC. Para abordar este problema es necesario evitar la interacción de los dos receptores y, para ello, se han diseñado y producido péptidos que interrumpen la interacción entre los dos receptores, de manera que el THC pueda disminuir el dolor sin activar el receptor de serotonina.
Un estudio con visión de futuro
En un estudio previo, cuando los investigadores inyectaron un péptido en el cerebro de los ratones, disminuyeron los problemas de memoria causados por el THC. Basándose en simulaciones de dinámica molecular y estrategias actuales de química farmacéutica, los investigadores han optimizado el prototipo original un desarrollando más péptido pequeño , con una elevada estabilidad, que permite la administración por vía oral al tiempo que aumenta su capacidad de cruzar la barrera hematoencefálica para acceder y actuar sobre las células del cerebro. Después de administrar el péptido a ratones por vía oral, junto con una inyección de THC, evaluaron el umbral del dolor y la capacidad de memoria. Los ratones tratados continuamente con THC y el péptido optimizado obtuvieron los beneficios del THC para aliviar el dolor y también una mejor memoria en comparación con los tratados solo con THC. "Nuestros resultados sugeridos que el péptido optimizado es un candidato ideal para reducir los efectos secundarios cognitivos del tratamiento del dolor con derivados del cannabis", indica Rafael Maldonado, catedrático de Farmacología del Departamento de Ciencias Experimentales y de la Salud (DCEXS) de la UPF.
"El programa Innovalora nos permitirá financiar parcialmente el experimento de prueba de concepto en dolor crónico que necesitamos para asegurar la participación de inversores en el proyecto", asegura Maria Gallo , cuya tesis doctoral en el grupo de Proteómica y Química de Proteínas del DCEXS la UPF recapitula buena parte del trabajo experimental del proyecto. "Prevemos el uso del péptido en combinación con THC como el primer medicamento aprobado por la EMA/FDA para el tratamiento del dolor crónico", concluye Rafael Maldonado.
Estos resultados han supuesto la base para la solicitud de patente internacional que se espera poder transferir al sector farmacéutico, una vez completados los experimentos de validación preclínica y clínica que requieren la normativa en materia de fármacos.