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Los beneficios del ozono para la artrosis de rodilla

El ozono mejora el cartílago reduciendo el dolor y la inflamación y mejorando el espacio articular en pacientes con esta enfermedad.

02/06/2021

Según un estudio del Hospital Universitario Santa Cristina de Madrid, el ozono beneficia al cartílago en artrosis de rodilla, una dolencia que afecta a casi 4 millones de personas y desarrolla en 50% de las discapacidades en España. Además de la incidencia, esta enfermedad tiene un impacto económico elevado con ...

Según un estudio del Hospital Universitario Santa Cristina de Madrid, el ozono beneficia al cartílago en artrosis de rodilla, una dolencia que afecta a casi 4 millones de personas y desarrolla en 50% de las discapacidades en España. Además de la incidencia, esta enfermedad tiene un impacto económico elevado con un coste anual de 4.738 millones o, lo que es lo mismo, un 0,5% del producto interior bruto del país.

Un grupo de investigadores españoles liderado por Marcos Fernández-Cuadros y Olga Pérez- Moro, del Servicio de Rehabilitación y Medicina Física del Hospital Universitario Santa Cristina de Madrid, han publicado un estudio en la Revista de la Sociedad Española del Dolor en el que concluyen que el ozono intraarticular mejora el dolor, la función y la rigidez, y mejora el espacio articular de los compartimentos medial y lateral en pacientes con artrosis de rodilla. Además, revela que el ozono modula la inflamación y podría tener un efecto anabólico entre quienes padecen esta patología. La relevancia de estos hallazgos ha sido tal, que la Revista Española del Dolor ha dedicado portada y Editorial sobre este artículo (Figura 1). El Dr. Daniel Samper Bernal, Autor de la Editorial "el Paradigma del Ozono", destaca la novedad de los hallazgos, ya no solo a nivel clínico (mejora de los síntomas), sino a nivel bioquímico y radiológico.

La investigación se realizó sobre 115 pacientes con artrosis de rodilla de grado 2 o más con síntomas clínicos que requerían tratamiento conservador y en los que fracasó el sintomático previo. El estudio se realizó de enero de 2016 a abril de 2019. El protocolo de ozono consistió en 4 sesiones (una sesión/semana) de una infiltración intra-articular de 20 ml. Según los resultados, no se reportó ninguna reacción adversa tras el tratamiento, excepto el dolor tras la infiltración, que cedió en pocos minutos. El doctor Fernández-Cuadros, autor principal del estudio, señala que "el ozono ha sido capaz de disminuir el dolor y la rigidez, además de mejorar la función y la calidad de vida, durante al menos 6 meses; además de reducir la inflamación, demostrado bioquímicamente (reducción de proteína C-reactiva, velocidad de sedimentación globular, y concentración de ácido úrico plasmático)".

El aumento del espacio intraarticular, podría deberse al efecto anabólico que se le atribuye al ozono (liberación de factores de crecimiento, incluido IGF-1). De confirmarse estos hallazgos en una serie más grande, se podría postular al ozono como substancia con propiedades modificadoras de la enfermedad artrósica. En este sentido, los autores están actualmente realizando un estudio a nivel molecular sobre el efecto del ozono en las rodillas artrósicas, midiendo la IL-6 (citoquina por-inflamatoria) y la IGF-1 (marcador anabólico), a fin de confirmar los prometedores hallazgos publicados recientemente en la Revista Española del Dolor. La Dra. Pérez-Moro añade, "en nuestro estudio, el empleo de ozono intrarticular ha demostrado ser un tratamiento seguro, sin efectos adversos y capaz de mejorar objetivamente biomarcadores clínicos, analíticos y radiológicos".

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