Un equipo de investigadores procedentes del Reino Unido, Alemania y los EE. UU. han hallado evidencia de pequeños depósitos de cobre y hierro en los cerebros de pacientes con Alzheimer fallecidos.

El Alzheimer es una patología cerebral progresivo en el que las células cerebrales se consumen, dejando que los afectados pierdan la función cerebral hasta que finalmente mueran, y que, hasta ahora, no tiene cura. En este estudio, publicado en la revista ´Science Advances´ los investigadores han detectado pequeñas cantidades de cierto tipo de cobre y hierro dentro de muestras de placa amiloide tomadas de dos pacientes con Alzheimer.

El hierro y cobre son esenciales y, junto con el zinc, representan los tres metales más abundantes en el cerebro humano. En general, el cuerpo los usa para distintos fines, además de regularlos porque pueden adoptar formas nocivas;que, normalmente, son expulsados.

En este caso, los investigadores encontraron algunas de esas formas elementales dañinas en la placa amiloide, una de las características del Alzheimer. "La identificación inesperada de estos metales dentro de las placas amiloides de la enfermedad de Alzheimer sugiere que los elementos metálicos biogénicos, previamente observados solo en microorganismos, virus y plantas, también pueden ocurrir en humanos", según los autores.

Para determinar la distribución y el estado químico del cobre y el hierro en muestras de placa amiloide humana, el investigador James Everett y su equipo examinaron núcleos de placa amiloide extraídos de la materia gris de los lóbulos frontal y temporal de los cerebros de los dos enfermos de Alzheimer utilizando microscopía de rayos X de transmisión de barrido basada en sincrotrón (STXM).

Los responsables del estudio identificaron hierro y cobre en diferentes estados químicamente reducidos dentro de una sola placa, incluidas varias formas ionizadas y elementales, lo que sugiere que pueden ocurrir reacciones repetidas de reducción y oxidación dentro de estos grupos reveladores de proteínas mal plegadas

Si bien se sabe que las enzimas y proteínas que contienen iones de cobre y hierro con carga positiva controlan procesos clave en el cerebro humano, se sabe poco sobre cómo el órgano mineraliza el hierro y el cobre. De ahí que los hallazgos podrían ayudar a los científicos a comprender mejor cómo estos metales elementales, que se descubrieron en los núcleos de las placas amiloides, contribuyen a las enfermedades neurodegenerativas y podrían apuntar a un objetivo para las terapias alternativas para el Alzheimer.