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El descubrimiento de la insulina, "uno de los mayores hitos de la historia de la medicina"

Se han cumplido 100 años desde que los investigadores Banting y Best purificaron el extracto pancreático del que se extrajo la hormona insulina. Abordamos con la Dra. Raquel Barrio Castellanos cómo el advenimiento de la insulina transformó a la diabetes de una enfermedad aguda-letal en una enfermedad crónica.

30/08/2021

___El objetivo del tratamiento de la diabetes es lograr el mejor control metabólico posible evitando tanto las hiperglucemias como las hipoglucemias con poca variabilidad glucémica para evitar las complicaciones agudas y la aparición y progresión de las complicaciones crónicas. Con las nuevas insulinas podemos conseguir más fácilmente dicho objetivo. ¿Cuál es ...

___El objetivo del tratamiento de la diabetes es lograr el mejor control metabólico posible evitando tanto las hiperglucemias como las hipoglucemias con poca variabilidad glucémica para evitar las complicaciones agudas y la aparición y progresión de las complicaciones crónicas. Con las nuevas insulinas podemos conseguir más fácilmente dicho objetivo.

¿Cuál es el principal mensaje que podemos obtener del 100 aniversario de la insulina? La Dra. Raquel Barrio Castellanos, diabetóloga pediátrica de la Clínica D-Médical (Madrid) y editora-jefe de la revista ´Diabetes´ de la Sociedad Española de Diabetes (SED), destaca que la insulina producida en las células beta de los islotes de Langerhans del páncreas endocrino es esencial para la supervivencia de nuestra especie. De hecho, afirma que "el descubrimiento de la insulina ha sido uno de los mayores hitos de la historia de la medicina".

Explica que se han cumplido 100 años desde que, en Toronto (Canadá), los investigadores Banting y Best purificaron el extracto pancreático del que se extrajo la hormona insulina. "Esto permitió, el 11 de enero de 1922, su utilización con éxito en la clínica a un paciente pediátrico de 14 años, Leonard Thompson, diagnosticado de diabetes. Antes de poder utilizar la insulina los pacientes con diabetes tipo 1 fallecían en cetoacidosis", aclara. De acuerdo con sus palabras, "el advenimiento de la insulina trasformó a la diabetes de una enfermedad aguda-letal en una enfermedad crónica, aunque no ha supuesto la curación definitiva de la diabetes".

Desde el inicio de su utilización, la insulina ha sido objeto de múltiples investigaciones para su purificación (ya que las primeras administraciones llevaron a reacciones alérgicas), modificación de su perfil de acción y avances en la forma de administración. Estos avances continúan con la aparición de nuevas insulinas que facilitan mucho la flexibilidad en la vida de las personas con diabetes.

Barrio Castellanos recuerda que "la insulina es una hormona imprescindible para el tratamiento de la diabetes tipo 1 y juega un papel importante en el tratamiento de la mayoría de los otros tipos de diabetes". No obstante, "la aparición de nuevos fármacos antidiabéticos con acciones más allá de controlar el nivel de glucosa ha sustituido su utilización en muchos pacientes con diabetes tipo 2 y alguna otra forma de diabetes".

La doctora resume que la "insulina ha sido inicialmente la salvadora de vidas y en la actualidad es un pilar básico para obtener un buen control de la diabetes, a corto y largo plazo, para evitar las complicaciones agudas y crónicas de la diabetes".

Una investigación muy prolífica

Le preguntamos cómo ha evolucionado la insulina en estos 100 años. "Un avance reseñable, tras su purificación, ha sido la obtención de insulina humana por técnicas de recombinación genética y, posteriormente, la obtención de análogos de insulina, primero de acción rápida [inyectables o por inhalación como la insulina Affreza] y de insulinas ultrarrápidas, necesarios para el control de la glucemia tras la ingesta, que es una de las mayores dificultades para el control de la diabetes", declara. Posteriormente, "la obtención de análogos basales de acción prolongada (de primera y segunda generación), con mayor duración y un perfil más plano, han llevado a un mejor control de la diabetes, sobre todo nocturno, con un menor riesgo de hipoglucemia, lo que ha permitido que podamos estar utilizando el régimen de tratamiento basal-bolo que es el que mejor posibilita remedar la producción endógena de insulina del organismo sano, si exceptuamos la administración subcutánea de insulina con bombas de infusión continua, tan en boga en la actualidad".

"La búsqueda, ya en camino, de insulinas de acción aún más prolongada (insulinas semanales en fase avanzada de investigación) van a mejorar la adherencia al tratamiento, sobre todo en pacientes con diabetes tipo 2", añade Barrio Castellanos. Por otro lado, se sigue investigando la obtención de una insulina que sea activa por vía oral y la consecución de insulinas inteligentes que se liberen según el nivel de glucosa. Como vemos, "la investigación en este campo sigue siendo muy prolífica".

La estrategia de tratamiento basal-bolo bien con múltiples dosis de insulina (MDI) o con sistema de administración subcutánea continua de insulina mediante bombas es la que mejor reproduce la secreción fisiológica de insulina. Si bien, requiere múltiples administraciones de insulina al día en el régimen de MDI. "El poder contar con diferentes insulinas tanto de acción más rápida como los análogos de acción más prolongada y con menos pico y diferentes maneras de administración permite al profesional individualizar el tratamiento con el objetivo de conseguir el mejor control glucémico con la menor variabilidad", indica. Asevera que "la combinación de un tratamiento intensivo, junto a una educación diabetológica adecuada y al uso de la monitorización continua de glucosa (ya muy difundida), es la clave para el éxito de un tratamiento en diabetes".

Por otro lado, "los recientes avances tecnológicos (plumas inteligentes, sistemas de asa cerrada híbrida, etcétera) facilitan al equipo diabetológico una individualización del tratamiento y un mejor control de la diabetes".

Ya en 1914 el Dr. Joslin vislumbró la importancia de la educación en diabetes y la necesidad de la formación de enfermeras especializadas en educación. "La educación terapéutica en diabetes es fundamental para implicar y ayudar al paciente o, en el caso de los niños, a la familia para que puedan autogestionar su diabetes en todos lo momento de su vida. La educación diabetológica es un proceso continuo que tiene que estar centrado en la persona para que adquiera los conocimientos, habilidades y actitudes, fomentando la autogestión del tratamiento con el fin de facilitar la adherencia para poder conseguir buenos resultados clínicos, buen estado de salud y de calidad de vida", aconseja Barrio Castellanos. Insiste en que el equipo diabetológico debe tener un programa estructurado con objetivos específicos. En la SED cuentan con la guía de Programas Estructurados de Educación Terapéutica donde se da la información de cómo desarrollar un programa de educación diabetológica. El educador en diabetes debe tener experiencia, conocimientos y destreza en aspectos sociales de comunicación con capacidad de empatía. Es necesario que la educación diabetológica se imparta desde el diagnóstico y se adecue a cada tipo de pacientes y de diabetes.

La conclusión de Barrio Castellanos es que ve un "futuro esperanzador" para las personas con diabetes por todos los avances que está habiendo en todos los campos relacionados con esta enfermedad.

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