Una avalancha de renuncias MIR está encendiendo las alarmas en el Sistema Nacional de Salud (SNS). En diversas comunidades autónomas están viendo cómo sus residentes abandonan las plazas a poco tiempo de haber ...
Una avalancha de renuncias MIR está encendiendo las alarmas en el Sistema Nacional de Salud (SNS).
En diversas comunidades autónomas están viendo cómo sus residentes abandonan las plazas a poco tiempo de haber comenzado su etapa de Formación Sanitaria Especializada (FSE). Por ejemplo, en Extremadura hasta ocho MIR optaron por renunciar a su plaza obtenida durante la convocatoria 2020-2021.
En concreto, cuatro de los desistimientos se han contabilizado en la especialidad de Medicina de Familia. El resto en Análisis Clínicos, Medicina del Trabajo, Neurofisiología Clínica y Farmacia Hospitalaria, todas ellas con una renuncia, según la Dirección General de Recursos Humanos del Servicio Extremeño de Salud (SES).
Por áreas de salud, las bajas se distribuyen entre las de Don Benito-Villanueva (tres, todas de Medicina de Familia); Mérida (con dos, una de Medicina de Familia y otra en Análisis Clínicos); Cáceres (una en Medicina del Trabajo); y Badajoz (una de Farmacia Hospitalaria y una de Neurofisiología Clínica).
Sin embargo, desde el Servicio Extremeño de Salud buscan tranquilizar indicando que "en total se han ocupado 21 plazas MIR más que en 2020", cuando la lograron 206 residentes, de los que finalmente la ocuparon 198, después de que se produjeran otras ocho renuncias.
En Ceuta, un MIR de Medicina del Trabajo y un EIR también renunciaron a la plaza obtenida durante la convocatoria 2020-2021, según los datos facilitados a los medios de comunicación por Enrique Roviralta Arango, presidente del Colegio Oficial de Médicos de Ceuta y del Sindicato de Médicos.
La principal preocupación de la avalancha de renuncias preocupa especialmente a la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria, siendo la disciplina que más residentes está perdiendo en diversas comunidades autónomas.
Así lo manifestó la Junta Permanente de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) al trasladar su "honda preocupación" respecto a los problemas derivados a corto, medio y largo plazo de las renuncias que se están produciendo por parte de los médicos internos residentes (MIR) de primer año con plazas de Medicina Familiar y Comunitaria.
En la distribución por comunidades autónomas, Castilla y León (con un 6,74 por ciento de renuncias), Cataluña (5,75 por ciento), Castilla-La Mancha (4,4 por ciento) y Extremadura (4,25 por ciento) duplican la media nacional de plazas que quedarán por cubrir: de cada 100 plazas, 2,41 se dan de baja.
En cuanto a provincias, Segovia (25 por ciento), Zamora (21,43 por ciento), Soria (13,3 por ciento) y Girona (10 por ciento), Teruel (7,69 por ciento), Guadalajara (7,14 por ciento), Badajoz, (7,02 por ciento) y Lleida (6,25 por ciento), son las que aglutinan un mayor porcentaje de renuncias.
"Aunque pueda parecer que un 2,41 por ciento es un dato poco significativo, el abandono de plazas formativas de futuros especialistas en Medicina siempre debe preocupar, más por el hecho de hallarnos con un claro déficit de especialistas que, a día de hoy, ya afecta la calidad profesional y asistencial. Adicionalmente, cabe señalar que Castilla y León y Cataluña se encuentran entre las autonomías con una comunidad médica en ejercicio con una tasa de envejecimiento por encima de la media española, según datos de la OMC en su Observatorio sobre Demografía Médica", admite la sociedad científica.