Pasar ante el televisión más de cuatro horas al día podría elevar un 35% el riesgo de coágulos de sangre, según un reciente estudio de la Universidad de Bristol, Reino Unido, en el que se examinó la asociación entre pasar horas sentado frente a la televisión y el tromboembolismo venoso ...
Pasar ante el televisión más de cuatro horas al día podría elevar un 35% el riesgo de coágulos de sangre, según un reciente estudio de la Universidad de Bristol, Reino Unido, en el que se examinó la asociación entre pasar horas sentado frente a la televisión y el tromboembolismo venoso (TEV). El TEV incluye embolia pulmonar (coágulo de sangre en los pulmones) y trombosis venosa profunda (coágulo de sangre en una vena profunda, generalmente las piernas, que puede viajar a los pulmones y causar embolia pulmonar).
"Los hallazgos de nuestro estudio también sugirieron que estar físicamente activo no elimina el mayor riesgo de coágulos de sangre asociados con ver la televisión durante mucho tiempo", según el autor principal, el Dr. Setor Kunutsor, de la Universidad de Bristol, Reino Unido, quien recomendó que "ante un ´atracón´ de televisión, se necesita tomar descansos y estirarse cada 30 minutos o usar una bicicleta estática".
Para la elaboración de este estudio, publicado en el European Journal of Preventive Cardiology, la publicación oficial de la Sociedad Europea de Cardiología ( ESC, por sus siglas en inglés), los investigadores realizaron una revisión sistemática para recopilar la evidencia publicada disponible sobre el tema y luego combinaron los resultados mediante un proceso llamado metanálisis. "La combinación de varios estudios en un metanálisis proporciona una muestra más grande y hace que los resultados sean más precisos y confiables que los hallazgos de un estudio individual", explicó el Dr. Kunutsor.
La cantidad de tiempo dedicado a ver televisión se evaluó mediante un cuestionario y los participantes se clasificaron como espectadores prolongados (viendo televisión al menos cuatro horas por día) y nunca o rara vez espectadores (viendo televisión menos de 2,5 horas por día).
La duración promedio del seguimiento en los tres estudios varió de 5,1 a 19,8 años. Durante este período, 964 participantes desarrollaron TEV. Los investigadores analizaron el riesgo relativo de desarrollar TEV en personas que miraban televisión de forma prolongada versus nunca/rara vez. Descubrieron que los espectadores prolongados tenían 1,35 veces más probabilidades de desarrollar TEV en comparación con los espectadores que nunca/rara vez.
La asociación fue independiente de la edad, el sexo, el índice de masa corporal (IMC) y la actividad física. "Los estudios realizados se ajustaron a estos factores, ya que están fuertemente relacionados con el riesgo de TEV; por ejemplo, la edad avanzada, el IMC más alto y la inactividad física están relacionados con un mayor riesgo de TEV", según el Dr. Kunutsor. "Los hallazgos indican que, independientemente de la actividad física, el IMC, la edad y el género, ver muchas horas de televisión es una actividad de riesgo en lo que respecta a la formación de coágulos de sangre".
En cuanto a las posibles razones de la relación observada, el responsable del estudio apuntó que la televisión durante un tiempo prolongado implica una inmovilización que es un factor de riesgo de TEV. Esta es la razón por la que se alienta a las personas a moverse después de la cirugía o durante un vuelo de larga distancia. Además, cuando se sienta en una posición rígida durante períodos prolongados, la sangre se acumula en las extremidades en lugar de circular y esto puede causar coágulos de sangre. "A ello se suma que, durante estos ´atracones televisivos´ también se tiende a comer alimentos poco saludables que pueden conducir a la obesidad y la presión arterial alta, lo que aumenta la probabilidad de coágulos de sangre", añadió.
El Dr. Kunutsor concluyó: "Nuestros resultados sugieren que debemos limitar el tiempo que pasamos frente al televisor. Se deben intercalar largos períodos de ver la televisión con movimiento para mantener la circulación. En términos generales, si pasa mucho tiempo sentado en su vida diaria (por ejemplo, su trabajo implica sentarse durante horas frente a una computadora), asegúrese de levantarse y moverse de vez en cuando". Asimismo, anotó que los hallazgos se basan en estudios observacionales y no prueban que mirar televisión durante mucho tiempo provoque coágulos de sangre.