Un equipo de investigadores dirigido por científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en San Diego (Estados Unidos) ha profundizado en los orígenes genéticos de la enfermedad del hígado graso no alcohólico (HGNA) en niños, describiendo múltiples variantes genéticas (incluyendo algunas previamente desconocidas) que contribuyen al ...
Un equipo de investigadores dirigido por científicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en San Diego (Estados Unidos) ha profundizado en los orígenes genéticos de la enfermedad del hígado graso no alcohólico (HGNA) en niños, describiendo múltiples variantes genéticas (incluyendo algunas previamente desconocidas) que contribuyen al riesgo de desarrollarla y variantes genéticas asociadas a la gravedad de esta enfermedad hepática.
La HGNA es una enfermedad en la que las células del hígado almacenan inadecuadamente grandes gotas de grasa, lo que interfiere en el funcionamiento normal del hígado. Puede evolucionar hacia una inflamación del hígado y una enfermedad denominada esteatohepatitis no alcohólica (EHNA), seguida de cirrosis y cáncer de hígado. La HGNA pediátrica también se asocia a un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, diabetes de tipo 2 y mortalidad en la edad adulta.
Investigaciones anteriores han identificado algunas variaciones genómicas individuales de la HGNA asociadas a puntos únicos en una secuencia de ADN, conocidos como polimorfismos de un solo nucleótido o SNP. Sin embargo, los trabajos han sido limitados.
Estos nuevos estudios, denominados Genetics of Obesity Associated Liver Steatosis (GOALS), se diseñaron para investigar con mayor profundidad y amplitud los SNP relevantes en los niños.
En el primer estudio, publicado en la revista científica ´Hepatology´, se ha evaluado el riesgo genético de transmisión de la HGNA. Los investigadores analizaron 252 tríos familiares (madre, padre e hijo con HGNA comprobada por biopsia). En el segundo, los investigadores examinaron a 822 niños con HGNA probada por biopsia para investigar la asociación de los SNP con la gravedad de la enfermedad.
Los autores confirmaron que el gen PNPLA3 es el que se asocia con el mayor riesgo de padecer HGNA. Otro SNP del gen TM6SF2 fue el que más se asoció con el porcentaje de células hepáticas que almacenaban gotas de grasa en los niños con HGNA.
"Sabíamos que la HGNA es una enfermedad genética. Ahora, gracias a los cientos de niños y familias que participaron en GOALS, pudimos completar detalles clave sobre qué genes contribuyen a tener HGNA y qué genes contribuyen a la gravedad de la enfermedad para un niño individual", ha explicado el autor principal del trabajo, Jeffrey Schwimmer.
El tejido cicatricial del hígado (fibrosis) es un factor clave para determinar quién sufrirá las consecuencias a largo plazo de su enfermedad hepática. La fibrosis hepática provoca una disminución del flujo sanguíneo en todo el órgano, causando una pérdida de función. Si no se trata, puede evolucionar hacia la cirrosis, la insuficiencia hepática y el cáncer de hígado.
Los investigadores descubrieron que el SNP PARVB rs6006473 se asociaba de forma alta y significativa con la fibrosis hepática, una nueva asociación de gravedad de la enfermedad en niños con HGNA. Al combinar la información de este SNP con la de otros genes, los investigadores pudieron desarrollar un modelo que podría ayudar a predecir la gravedad de la fibrosis hepática en niños con HGNA.
Además, el SNP PNPLA3 estaba significativamente enriquecido en los niños con EHNA de zona límite 1, una manifestación de la enfermedad que se encuentra comúnmente en los niños pero no en los adultos. "Los niños con este tipo de EHNA pueden responder de manera diferente a los medicamentos, y por lo tanto vale la pena identificar este genotipo en los niños para los ensayos clínicos para EHNA", apunta otro de los autores principales, Nidhi Goyal.
"Esto refuerza que la HGNA en los niños puede ser una enfermedad distinta a la de los adultos. La presencia de nuevos SNP en los niños con HGNA y la forma en que afectan diferencialmente a los resultados de la enfermedad puede ayudar a guiar los tratamientos futuros. Estas asociaciones genéticas pueden ser fundamentales para crear futuras terapias en la HGNA pediátrica, donde actualmente las opciones de tratamiento son limitadas", remacha Schwimmer.