El grupo agroalimentario Roquette ha desarrollado, junto con la asociación local Afabals, el programa `Alimentarse Saludablemente´ destinado al tratamiento, la prevención y el manejo de la enfermedad de Alzheimer a través de la alimentación. La multinacional ha decidido colaborar con la asociación local para ayudar a pacientes, familiares y profesionales ...
El grupo agroalimentario Roquette ha desarrollado, junto con la asociación local Afabals, el programa `Alimentarse Saludablemente´ destinado al tratamiento, la prevención y el manejo de la enfermedad de Alzheimer a través de la alimentación. La multinacional ha decidido colaborar con la asociación local para ayudar a pacientes, familiares y profesionales a abordar los riesgos alimentarios más comunes asociados a esta enfermedad, entre ellos, la disfagia. Este trastorno está vinculado a la forma de tragar alimentos sólidos, semisólidos y líquidos y puede afectar al 84% de los pacientes que sufren Alzheimer, según se explica desde la Asociación de Enfermeras de Nutrición y Dietética.
El proyecto, que se puso en marcha a comienzos de este año, ha contado con la participación de 85 personas entre pacientes, profesionales y familiares. Según ambas entidades el balance del primer semestre del programa ha sido muy positivo. "Roquette está decidida a crear un futuro mejor y más saludable para todas las generaciones. Desde que lanzamos nuestro enfoque de desarrollo sostenible en 2008, basado en cuatro pilares clave (innovación, abastecimiento, biorefinación, actuación), siempre hemos situado el desarrollo sostenible en el centro de todo lo que hacemos. Prestar especial atención a las asociaciones con nuestras comunidades locales y contribuir a su bienestar. Estamos comprometidos a apoyar proyectos educativos innovadores en las áreas de alimentación y nutrición como este proyecto" explica Esther Jordá, responsable de comunicación de Roquette en España.
De total de personas beneficiarias de la iniciativa, 36 eran pacientes, 11 hombres y 25 mujeres, principalmente habitantes de los municipios de Benifayó, Almussafes y Sollana. Entre ellos, el 47% estaba diagnosticado con Alzheimer, el 26% con demencia vascular, el 18% con deterioro cognitivo, el 6% con demencia frontotemporal y un 3% con demencia con cuerpos de Lewy. Todas estas patologías son enfermedades clave en el desarrollo de la disfagia debido a las alteraciones cognitivas que sufren. En este sentido, en la segunda acción del programa `Alimentarse Saludablemente´, destinada a la prevención de la disfagia, se han formado a 5 profesionales de la Asociación AFABALS para la detección y el abordaje precoz de este trastorno.
La enfermedad de Alzheimer es un trastorno degenerativo que ocasiona un deterioro progresivo en el cerebro, produciendo cambios en la persona, en su manera de relacionarse, comportarse o incluso alimentarse. Por tanto, el comportamiento de una persona que padece Alzheimer frente a la comida se va modificando con el tiempo a medida que progresa la enfermedad, llegando a veces a tener una dependencia total para que les alimenten. En este sentido, la alimentación tiene mucho que aportar en la prevención y el manejo de esta enfermedad, pero, como indican los expertos de la Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral, una de las principales causas de esta problemática es la falta de concienciación y formación sobre nutrición y alimentación de los enfermos de Alzheimer, entre los profesionales, los familiares y cuidadores.
Un proyecto para pacientes y familiares
El programa creado por Roquette junto con la asociación local Afabals, consta de tres talleres: neuronutritivos, de prevención de la disfagia y otros riesgos asociados a la alimentación y, formativos. Estos están formados por distintas acciones, la mayoría de ellas destinadas a los propios pacientes, así como también a sus familiares, cuidadores y profesionales de la asociación. "Entre los objetivos de las distintas actividades se encuentran la estimulación de las capacidades cognitivas de los usuarios, la identificación de pacientes con riesgo de disfagia, desnutrición o deshidratación, la prevención de la aparición de complicaciones asociadas a una alimentación inadecuada, la disminución del riego de aspiración en pacientes con dificultades en la deglución o, la formación de familiares y cuidadores dotándoles de herramientas en el abordaje de la alimentación en personas con Alzheimer", explica Cristina Miralles directora del centro de estimulación y rehabilitación "La Llimera" - AFABALS.
En este primer semestre de puesta en marcha, la primera acción desarrollada ha sido `Alimentando el cerebro´, basada en la realización de cinco jornadas temáticas divididas en cinco alimentos beneficiosos para la salud: espinacas, fresas, aguacate, huevo y nuez. En todos ellos, los 36 participantes han recibido una estimulación cognitiva basada en la Terapia de Reminiscencia, en la que los pacientes han compartido y reflexionado sobre su propia experiencia y, posteriormente, con los alimentos han realizado dos talleres, uno de cocina y uno ocupacional.
La segunda acción del programa es la `Prevención de la Disfagia´, en la cual se han formado cinco profesionales del centro para poder hacer una detección precoz de los posibles pacientes con este trastorno y un abordaje correcto de sus necesidades. En este sentido, del total de beneficiarios, se han detectado 8 casos en los que se ha necesitado una adaptación en su alimentación y se han derivado 4 casos a profesionales sanitarios que están ahora mismo siendo estudiados.