Vacunar a 370 millones de niños anualmente durante los próximos cinco años y continuar con la vigilancia de la enfermedad en 50 países es uno de los principales objetivos del Plan estratégico de la poliomielitis 2022-2026, que tiene como objetivo superar los obstáculos existentes, fortalecer los sistemas de salud en ...
Vacunar a 370 millones de niños anualmente durante los próximos cinco años y continuar con la vigilancia de la enfermedad en 50 países es uno de los principales objetivos del Plan estratégico de la poliomielitis 2022-2026, que tiene como objetivo superar los obstáculos existentes, fortalecer los sistemas de salud en los países afectados y lograr un mundo libre de poliomielitis para 2026.
Además, en la Cumbre Mundial de la Salud, que se celebra estos días en Berlin, los líderes mundiales se han comprometido a destinar 2.600 millones de dólares para poner fin a la poliomielitis, considerada como una enfermedad altamente infecciosa que puede llegar a causar parálisis irreversible . En los últimos años, los esfuerzos de vacunación han evitado que unos 20 millones de niños sufran las consecuencias de esta patología.
Actualmente, el poliovirus salvaje es endémico en solo dos países: Pakistán y Afganistán. Sin embargo, después de que se registraran seis casos en 2021, en lo que va de 2022 se han detectado 29 casos, incluida una pequeña cantidad de casos en el sureste de África vinculados a una cepa originaria de Pakistán. Además, los brotes de cVDPV , variantes del poliovirus que pueden surgir en lugares donde no se ha inmunizado a suficientes personas, continúan propagándose en partes de África, Asia y Europa, con nuevos brotes detectados recientemente en Estados Unidos, Israel y Reino Unido.
"Las nuevas detecciones de poliomielitis este año en países previamente libres de poliomielitis son un claro recordatorio de que si no cumplimos nuestro objetivo de acabar con la poliomielitis en todas partes, puede resurgir a nivel mundial", tal como expuso el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS. "Estamos agradecidos por el apoyo nuevo y continuo de los donantes para la erradicación, pero aún queda trabajo por hacer para financiar completamente la Estrategia 2022-2026. Debemos recordar los importantes desafíos que hemos superado para llegar tan lejos contra la polio, mantener el rumbo y terminar el trabajo de una vez por todas".
Compromisos económicos
Y es que, según ha informado la OMS, los gobiernos y los socios han dado un paso al frente para demostrar su determinación colectiva de erradicar esta enfermedad. Además de las promesas existentes, los nuevos compromisos con la Estrategia 2022-2026 este otoño incluyen, según datos de la OMS: Australia, 43,55 millones de dólares australianos; Francia, 50 millones de euros; Alemania, 72 millones de euros; Japón, 11 millones de dólares; República de Corea, 4.500 millones wones; Luxemburgo, 1,7 millones de euros; Malta,30.000 euros; Mónaco, 450 000 euros; España,100 000 euros; Turquía, 20 000 dólares; Estados Unidos,114 millones de dólares; Fundación Bill y Melinda Gates, 1.200 millones de dólares; Bloomberg Philanthropies, 50 millones de dólares; El Consejo Islámico de Alimentación y Nutrición de América,1,8 millones de dólares; Latter-day Saint Charities, 400.000 dólares; Rotary International, 150 millones de dólares; y, finalmente, UNICEF, 5 millones de dólares.
Declaración científica sobre la poliomielitis
El mundo de la Ciencia también se ha sumado al apoyo de este plan. Así, más de 3.000 científicos , junto a expertos en salud de 115 países han instado al mundo a financiar completamente la estrategia de erradicación tras el resurgimiento de la enfermedad, en un manifiesto firmado por todos ellos.
Los firmantes del documento respaldan las nuevas tácticas contenidas en la estrategia del programa, como el lanzamiento de la nueva vacuna oral contra la poliomielitis tipo 2 (nOPV2) para acabar con la poliomielitis. Ya se han administrado quinientos millones de dosis en 23 países, y los datos de campo continúan demostrando los beneficios de esta herramienta para detener de manera más sostenible los brotes de cVDPV tipo 2.
El grupo afirma además que el apoyo a la erradicación fortalece significativamente los sistemas de inmunización y la preparación para pandemias en todo el mundo. Asimismo, insta a los líderes de los países endémicos y afectados por la poliomielitis a mantenerse comprometidos con las actividades ampliadas de vacunación y vigilancia de enfermedades.