La Unidad de Farmacia de Atención Primaria del ICS en la Cataluña Central ha liderado un estudio, en colaboración con el Col·legi de Farmacèutics de Barcelona, para conocer qué sabe la ciudadanía de la resistencia antibiótica. Este estudio determina que la población de la Cataluña Central suspende en el conocimiento de la resistencia a los antibióticos. La puntuación media de las encuestas ha sido de 4,8 puntos sobre una puntuación total de 10 puntos.

Los resultados del estudio se hacen públicos coincidiendo con la Semana Mundial de Concienciación sobre el Uso de los Antibióticos, que tiene lugar entre el 18 y el 24 de noviembre, promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS). El cuestionario se ha difundido entre la población de la Cataluña Central en los centros de atención primaria, en las farmacias, en los institutos y, también, a través de un código QR, y ha permitido recoger las respuestas de 2.085 participantes. La mayoría de las encuestas han sido respondidas por mujeres (63%), por personas de entre 14 y 18 años de edad (37% de la muestra) y, mayoritariamente, de la comarca de la Anoia (57% de respuestas).

¿Quién se vuelve resistente al antibiótico, nosotros o las bacterias?

Las seis preguntas de la encuesta se interesan por el conocimiento respecto a las indicaciones de los antibióticos, por el concepto de la resistencia a estos fármacos y qué consecuencias tiene, así como por qué acciones puede hacer la ciudadanía para minimizarlas. Entre los resultados destaca que un 58% de los encuestados cree, erróneamente, que la resistencia a los antibióticos aparece cuando el organismo se hace resistente a este tipo de medicamento, pero no es el organismo quien se vuelve resistente a los antibióticos, sino las bacterias, como resultado de mutaciones genéticas, hecho que provoca que el medicamento no sea eficaz para combatirlas y que sea necesario utilizar un antibiótico menos accesible.

Actualmente, la resistencia a los antibióticos representa una de las mayores amenazas en salud pública del mundo. Aparece de forma natural con el tiempo y el uso inadecuado y el abuso de los antibióticos en plantas, animales y personas, que acelera el proceso hasta niveles muy elevados. Un 54,6% de los encuestados sabe que puede hacer acciones para parar la aparición de resistencias como, por ejemplo, tener las vacunaciones al día. Aun así, un 66% también opina que es un fenómeno descontrolado que cada vez va a peor y que no puede hacer nada para pararlo.

¿Cómo influir en el buen uso de los antibióticos?

Mar Casanovas, farmacéutica del ICS Cataluña Central que ha liderado el estudio, explica que "el análisis detallado de los resultados se orientará a definir estrategias para mejorar la divulgación y la concienciación en diferentes grupos de población de la Cataluña Central, sobre todo entre los jóvenes. Estas estrategias, que serán consensuadas entre los farmacéuticos de Atención Primaria que trabajan en los CAP y los farmacéuticos comunitarios, permitirán influir en el buen uso de los antibióticos a través de estos mismos colectivos profesionales, así como del resto de trabajadores de la salud de los diferentes ámbitos asistenciales y, de forma específica, desde la Atención Primaria".

La encuesta se repetirá con una periodicidad de dos años para poder hacer un seguimiento del impacto de estas estrategias de mejora en el conocimiento y la sensibilización de la ciudadanía sobre los antibióticos y su uso.