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La rosácea incrementa el riesgo de carcinomas queratinocíticos y de queratosis actínica

Científicos recomiendan mayor protección solar para prevenir la incidencia de cánceres de piel en estos pacientes.

09/12/2022

Un estudio retrospectivo realizado en más de 11.000 pacientes con rosácea indica que éstos presentan un riesgo 6 y 2 veces mayor de sufrir queratosis actínica y cáncer de piel escamoso o de células basales, respectivamente. El aumento de riesgo en el cáncer de piel fue específico, ya que la ...

Un estudio retrospectivo realizado en más de 11.000 pacientes con rosácea indica que éstos presentan un riesgo 6 y 2 veces mayor de sufrir queratosis actínica y cáncer de piel escamoso o de células basales, respectivamente. El aumento de riesgo en el cáncer de piel fue específico, ya que la rosácea no aumentó el riesgo de melanoma ni de cánceres en otros órganos, tales como el hígado, colon o estómago. Los hallazgos son consistentes con la recientemente desarrollada noción de que la rosácea tiene implicaciones más allá de las lesiones en la piel de la cara. En efecto, estudios anteriores ya habían teorizado que esta patología es la manifestación de múltiples comorbilidades sistémicas que reflejan un estado inflamatorio crónico. Los hallazgos son consistentes con los de dos estudios previos realizados en EE.UU. y Europa, que reportaron mayor incidencia de cáncer de células basales y de carcinoma queratinocítico, respectivamente, en pacientes con rosácea. Ninguno de estos dos estudios halló asociación con el melanoma.

Soo Ick Cho, científico de la Universidad de Seúl y director del actual trabajo, afirma que en la cohorte de pacientes examinada hubo una elevada prevalencia de alteraciones metabólicas y circulatorias, tales como diabetes, dislipidemia y presión arterial elevada, factores que fueron tenidos en consideración en el análisis de asociación. Cho recomienda que estos pacientes sean cribados con mayor frecuencia a la búsqueda de lesiones indicadoras de cáncer de piel o queratosis actínica, así como mayor protección frente a los rayos ultravioleta, los cuales son un importante factor patogénico tanto en la rosácea como en el cáncer de piel.

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