Prescinde del uso de suero y de células de soporte animales, permite la criopreservación y, a través de una modificación genética, genera células aptas para transfusión en cualquier paciente.
Cell Technology ha desarrollado un procedimiento de tres pasos para generar megacariocitos y plaquetas humanas en menos de 20 días a partir de células madre inducidas pluripotenciales (iPSC). Las plaquetas producidas con este método son prácticamente indistinguibles de las naturales y son completamente funcionales in vivo. En un modelo de daño ...
Cell Technology ha desarrollado un procedimiento de tres pasos para generar megacariocitos y plaquetas humanas en menos de 20 días a partir de células madre inducidas pluripotenciales (iPSC). Las plaquetas producidas con este método son prácticamente indistinguibles de las naturales y son completamente funcionales in vivo. En un modelo de daño arteriolar en ratón, se incorporan con la misma velocidad que las plaquetas humanas aisladas de sangre. El procedimiento parte de iPSCs en las que el gen de la beta 2-microglobulina ha sido inactivado y que, por tanto, no pueden generar moléculas de histocompatibilidad de clase I, lo que elimina la restricción de uso por causas inmunológicas.
La nueva tecnología vence las numerosas dificultades con las que tradicionalmente se ha topado la generación de plaquetas in vitro; aunque las células CD34+ de médula ósea y de cordón umbilical han sido comúnmente utilizadas con este objetivo, la producción es dependiente del donante y la capacidad de expansión de las células, limitada. Los métodos previos basados en iPSCs y células madre embrionarias requieren fibroblastos embriónicos de ratón como células de soporte y suero en algún momento del cultivo, lo que frecuentemente resulta en contaminaciones con patógenos xenogénicos que aumentan la probabilidad de reacciones inmunogénicas en el paciente receptor.
La ausencia de estos componentes en el nuevo método facilita enormemente su aplicación en clínica. Además, la capacidad de criopreservación de los precursores megacariocíticos permite la producción rápida de miles de millones de plaquetas tras la descongelación. La generación de este tipo de plaquetas a partir de una fuente renovable de células representa un paso más hacia la resolución de la refractariedad a las plaquetas por causas inmunológicas.