Expresiones negativas, aislamiento, evitar tratar algunos temas y sufrir trastornos de la alimentación y el sueño son algunos de los síntomas que deben alertar a los padres de que su hijo se está autolesionando, según ha informado la escritora y directora del Centro de Psicología Clínica y de Salud de ...
Expresiones negativas, aislamiento, evitar tratar algunos temas y sufrir trastornos de la alimentación y el sueño son algunos de los síntomas que deben alertar a los padres de que su hijo se está autolesionando, según ha informado la escritora y directora del Centro de Psicología Clínica y de Salud de Valencia, Sara Navarrete.
"Muchos jóvenes se autolesionan o se intentan quitar la vida convencidos de que es la única solución para acabar con su sufrimiento. La necesidad de los padres es saber cómo evitarlo y cómo ayudarlos y aquí es esencial observar diariamente a nuestros hijos porque eso no es una decisión que se tome de la noche a la mañana, sino que durante un tiempo irán mandándonos señales que nos estarán indicando que algo en ellos no va bien", ha dicho.
Por ello, la experta ha destacado la importancia de aprender a detectar esas señales y así poder actuar "con rapidez". "Cuando nuestro hijo verbaliza frases negativas hacia su persona como ´Yo no valgo para nada´, ´La vida da asco´, ´La vida no tiene sentido´, ´Soy una carga´, ´Lo mío no tiene solución´, ´Me gustaría desaparecer´, debemos saber que nos encontramos ante una señal de alarma importante y tenemos que preguntarles para indagar qué hay detrás de esto", ha afirmado la psicóloga.
Además, prosigue, si el hijo se aísla, no quiere salir con los amigos, no quiere incluso compartir momentos con nosotros porque prefiere estar en la habitación, está indicando que algo no va bien. Del mismo modo, la experta ha llamado la atención sobre si evitan hablar de lo que les pasa.
En este contexto, Navarrete ha resaltado que es esencial trabajar la autoestima como eje del bienestar porque una autoestima sana es lo que nos ayuda a enfrentarnos ante situaciones complicadas. "Un adolescente con una buena autoestima será menos vulnerable a pensamientos negativos sobre su persona y vida y, a la vez, también le permitirá ser capaz de pedir ayuda en un momento complicado", ha afirmado.
Esto hace que lograr que haya una buena comunicación en las familias es esencial porque si no tienen la confianza de poder compartir lo que les sucede, los padres nunca podrán intervenir. "Tenemos que educar a nuestros hijos desde bien pequeños en el diálogo y la confianza. Si aprenden que pueden contarnos todo lo que les pasa, cuando sean mayores ya estarán esos puentes para poder comunicarnos con ellos. No obstante, es tan importante la comunicación que nunca es tarde, siempre es buen momento para demostrarle a nuestro hijo que estamos ahí para escucharles", ha asegurado.
Algunas recomendaciones que pueden ayudar a los padres a reforzar la autoestima de sus hijos pasan por aceptarlos tal y como son; demostrarles que pase lo que pase y hagan lo que hagan se les quiere; garantizarles une punto de apoyo y que no crean que por sentir lo que sienten nadie les va a entender; validar lo que sienten; no restarle importancia a sus sentimientos; y no etiquetarles.