Madrid acoge del 27 al 30 de septiembre el Congreso Mundial de Cardio-Oncología, organizado por la Sociedad Internacional de Cardiología (ICOS), la Sociedad Española de Cardiología (SEC) a través de su Grupo de Trabajo de Cardio-Oncología, la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y la Sociedad Española de Hematología y ...
Madrid acoge del 27 al 30 de septiembre el Congreso Mundial de Cardio-Oncología, organizado por la Sociedad Internacional de Cardiología (ICOS), la Sociedad Española de Cardiología (SEC) a través de su Grupo de Trabajo de Cardio-Oncología, la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH). El encuentro arranca hoy con una jornada sobre investigación básica y traslacional que se celebra en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC), con la participación del Dr. Valentín Fuster, y termina el sábado con una jornada específica para profesionales de enfermería.
Como explica la Dra. Teresa López, coordinadora del Grupo de Trabajo de Cardio-Oncología de la SEC, "la longevidad y calidad de vida de los supervivientes de cáncer ha mejorado drásticamente en los últimos años, debido en gran parte al desarrollo de nuevas opciones terapéuticas contra el cáncer. Si bien esto ha aumentado el número de supervivientes de cáncer, también ha incrementado la incidencia y prevalencia de toxicidades relacionadas con los tratamientos antitumorales. Tanto es así que las toxicidades cardiovasculares relacionadas con los tratamientos antitumorales se han convertido en un desafío frecuente tanto para los pacientes como para los médicos".
Se sabe que al menos uno de cada tres pacientes con cáncer desarrolla toxicidad cardiovascular. Esto ha llevado al surgimiento de una nueva disciplina, la Cardio-Oncología, que aborda las necesidades cardiovasculares de los pacientes con cáncer y optimiza su asistencia con un enfoque multidisciplinario. "Se trata de una subespecialidad médica orientada a prestar una asistencia cardiovascular integral a los pacientes con cáncer desde su diagnóstico hasta la supervivencia posterior", aclara la Dra. Teresa López.
Como representante de la SEHH, el Dr. Raúl Córdoba Mascuñano, miembro de su junta directiva, hace hincapié en que "es necesario realizar un verdadero abordaje multidisciplinar en todos los pacientes con cáncer, sobre todo en aquellos que serán largos supervivientes, en los que tenemos que cuidar de forma global su salud, tanto antes, durante como una vez finalizado el tratamiento".
El Dr. Javier de Castro, vicepresidente de SEOM y miembro del Grupo de Trabajo de Cardio-Oncología indica: "SEOM, como garante de la atención integral del paciente oncológico, considera muy relevante preservar la salud cardiovascular de los enfermos con cáncer. Para ello, el trabajo multidisciplinar junto con cardiólogos y otros especialistas es básico no solo para la prevención de efectos secundarios cardiovasculares que las terapias oncológicas pueden desencadenar sino para favorecer la calidad de vida más allá de la enfermedad oncológica. Por ello, la evaluación individualizada del riesgo antes del inicio de los tratamientos oncológicos es clave, al igual que el seguimiento de los pacientes durante el mismo y una vez se haya superado la enfermedad. En este sentido, a medida que el número de pacientes supervivientes al cáncer se va incrementando de forma significativa, gracias a la eficacia de las nuevas terapias oncológicas, es fundamental concienciar a oncólogos y otros especialistas implicados en el cuidado de los pacientes de la necesidad de trabajar para que mantengan la mejor salud cardiovascular y puedan continuar su vida más allá del cáncer con un estado físico óptimo y sin secuelas. Para ello, SEOM lleva años trabando con la SEC y otras sociedades científicas para que la atención conjunta multidisciplinar de la salud cardiovascular esté disponible para todos los pacientes, por lo que las labores de divulgación, formación y desarrollo de guías de práctica clínica, reuniones conjuntas de trabajo y realización de proyectos ha sido y sigue siendo fundamental. La celebración del congreso ICOS en España, es un hito que demuestra el nivel científico alcanzado por la cardio-oncología española y el nivel de colaboración entre los distintos profesionales. Prueba de ello, es la presencia de la oncología médica en la coordinación del congreso, ponencias y mesas de debate. Reuniones científicas como está servirán para seguir mejorando la calidad de la atención de los pacientes oncológicos".
Retos en Cardio-Oncología
La jornada sobre investigación básica y traslacional celebrada en el CNIC es la primera de estas características que tiene lugar en Europa y reunirá a investigadores de diferentes especialidades que atienden a pacientes con cáncer. La coordinación de estos profesionales permite que los investigadores básicos se centren en temas que son relevantes para mejorar la atención a los pacientes, y que los clínicos tengan acceso a esta información para validar los resultados de la investigación básica.
"En Cardio-Oncología hace falta conocer más en profundidad los mecanismos de toxicidad cardiovascular de los tratamientos antitumorales para desarrollar scores de riesgo y estrategias de prevención personalizadas", explica la coordinadora del Grupo de Trabajo de Cardio-Oncología de la SEC.
Para poner en valor el simposio, y dar a conocer los aspectos más importantes que se van a tratar durante esta jornada, el Dr. Valentín Fuster, Director General del CNIC y editor jefe de JACC, y Bonnie Ky, editora de JACC Cardio-Oncology, así como los ponentes de la jornada, han escrito un artículo que se publica hoy en JACC Cardio-Oncology.
Temas de interés
Entre los temas de interés que se abordarán durante la jornada de investigación y el resto del congreso, destacan la sesión sobre inmunoterapia ligada al proyecto SIR-CVT, un registro puesto en marcha por la SEC, SEOM y CNIC; RESILIENCE, proyecto estrella del CNIC, liderado por el Dr. Borja Ibáñez; y una charla sobre cómo las antraciclinas aceleran el envejecimiento celular y, por eso, producen insuficiencia cardiaca. Actualmente, explica el Dr. Borja Ibáñez, coordinador del proyecto RESILIENCE y Director Científico del CNIC, "hay dos grandes necesidades clínicas no resueltas en relación con la cardiotoxicidad asociada al uso de antraciclinas: la falta de terapias capaces de prevenir o curar esta condición, y la ausencia de marcadores específicos para identificar el problema en sus primeras etapas".
Además, la Cardio-Oncología no solo se centra en prevenir la toxicidad. Como se repasará en otra de las sesiones más destacadas, hay un aumento creciente en el número de pacientes con enfermedades cardiovasculares que desarrollan cáncer. De ahí que los cardiólogos tengan que organizar sus estrategias de cribado de cáncer y colaborar con oncología para que, aunque sean pacientes de alto riesgo, puedan beneficiarse de los tratamientos que generalmente se les deniegan por alto riesgo. También se repasarán las novedades en la patología de la mujer con cáncer y enfermedad cardiovascular, y cómo organizar de forma sostenible el seguimiento de niños y adultos supervivientes de cáncer.