La Sociedad Española de Calidad Asistencial, SECA, ha inaugurado en Murcia su Congreso anual, con la participación de más de 800 profesionales y expertos. Durante tres días, este 39º Congreso, organizado con la Sociedad Murciana de Calidad Asistencial (SOMUCA), analizará el papel de la calidad asistencial como factor clave de la transformación del sistema sanitario hacia modelos más sostenibles. Abordará 6 áreas temáticas: la gestión de la calidad; la equidad y la accesibilidad; los sistemas de información; la relación con los pacientes; la atención sanitaria basada en el valor y la seguridad del paciente.

Acto inaugural

El ministro de Sanidad en funciones, José Miñones, ha intervenido telemáticamente en el acto inaugural del XXXIX Congreso SECA, y ha destacado que el Sistema Nacional de Salud está conformado por un complejo entramado de competencias, centros, servicios y profesionales, que tiene a las personas en su centro de acción y como razón de ser de todas sus políticas.

En este sentido, ha subrayado el compromiso de las profesiones y profesionales sanitarios con la protección de la vida y el cuidado de las personas, razón por la que "nos autoimponemos mayores estándares de calidad e innovación en la práctica clínica".

En el acto inaugural del Congreso han intervenido también: el consejero de Salud de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, Juan José Pedreño Planes, la presidenta de SECA, Inmaculada Mediavilla, y el presidente de SOMUCA y del Comité Organizador, Julián Alcaraz Martínez.

La presidenta de SECA ha querido destacar que el Congreso de la Sociedad Española de Calidad Asistencial contará este año como novedad con 4 espacios SECA en los que se abordarán dos de las líneas que se están desarrollando dentro del Plan Estratégico de la Sociedad: La relación de SECA con las sociedades autonómicas y la participación de los socios en la Sociedad. Se van a presentar también la norma Patient First y la herramienta SECA Acredita que va a permitir a esta Sociedad acreditar Unidades de Calidad.

Conferencia inaugural de José Ramón Repullo: "Estamos ante el reto de crear una burbuja que proteja la medicina de los sesgos e intereses"

La conferencia inaugural "La calidad asistencial y la sostenibilidad del sistema sanitario" ha corrido a cargo de José Ramón Repullo Labrador, profesor emérito de Planificación y Economía de la Salud de la Escuela Nacional de Sanidad (Instituto de Salud Carlos III).

Repullo ha repasado importantes retos que debe afrontar el sistema sanitario, tanto a nivel macro, como micro y meso, empezando por el gasto en medicamentos. "El medicamento del hospital ha crecido un 285%", ha indicado. "Sin embargo, más gasto sanitario no equivale a más salud, y por lo tanto tenemos que ser exigentes sobre dónde ponemos el dinero".

Por otra parte, a nivel global (planetario) es imposible universalizar la medicina; "la mayoría de países y familias no pueden pagarla". En su opinión, "hay que ajustar la tendencia antes de que los desequilibrios financieros nos arrastren. La alternativa es hacer otras cosas o de diferente manera", ha señalado.

Respecto a la sostenibilidad organizativa, José Ramón Repullo ha destacado que "las organizaciones profesionales sanitarias necesitan instrumentos de organización basados en autonomía de gestión responsable".

En su opinión, "hay que dotar a las redes y o/ centros sanitarios públicos de capacidades para la gestión operativa de su presupuesto, su personal, sus compras y contratos, de manera que se cree un marco de gestión adaptado a la naturaleza de la prestación de los servicios sanitarios".

En tercer lugar, ha hablado de la sostenibilidad interna, y que -según ha explicado- se basa en el profesionalismo. "Hay que ser muy canalla para no empatizar con el paciente o com-padecer-le a su lado", ha comentado.

A este respecto, se ha lamentado de la dificultad que supone mantener cambios -morales- si la sociedad va en otro sentido.

Repullo defiende que el profesionalismo es parte de la solución, "claramente", y en este sentido argumenta que para fomentar una conducta que permita la sostenibilidad interna "necesitamos liberar en lo posible a los clínicos de presiones e influencias" (económicas, políticas, mediáticas…).

En su opinión, los poderes públicos deben asegurar que esa autonomía no esté sesgada. "Estamos en el reto de crear una burbuja que proteja la medicina de los sesgos e intereses".

Ha finalizado su intervención exponiendo otros retos como "moderar el entusiasmo por innovaciones aún inmaduras y volver a disfrutar de la buena medicina clínica. "Hemos de enfrentar las decisiones clínicas con una buena formación, un excelente entrenamiento y una pasión insobornable por servir al ser humano que sufre".