El entrenamiento en mindfulness puede beneficiar a los médicos a nivel individual, a través de un manejo más eficaz de los factores estresantes ocupacionales, según sugiere un reciente estudio publicado en el ´Canadian Medical Association Journal´, con la participación de investigadores de la Universidad de Toronto (Canadá).

Para la investigación se reclutaron médicos de diversas especialidades, incluidas cirugía, psiquiatría, medicina de emergencia y medicina familiar. Durante un período de cinco semanas, los participantes asistieron a sesiones semanales presenciales de capacitación en atención plena aplicada, basadas en las enseñanzas del monje budista zen Thích Nhất Hạnh.

Los participantes informaron que integrar breves prácticas de atención plena al principio y al final de su jornada laboral puede conducir a una regulación más efectiva de los factores estresantes en el lugar de trabajo, lo que puede llevar a sentirse con más energía al final del día. Asimismo, consideraron que el entrenamiento en mindfulness les ayudó a tener mejores habilidades a la hora de equilibrar su vida laboral y familiar.

Los profesionales médicos participantes también informaron a los investigadores de haberse detectado una mejor comunicación con sus pacientes y equipo sanitario como resultado del entrenamiento en mindfulness. Esto incluyó una mayor autoconciencia y una menor reactividad cuando se tuvieron que enfrentar a situaciones desafiantes en su consulta clínica.

A través de esta comprensión, pueden implementar estilos de comunicación más compasivos, lo que les ayuda a establecer y mantener límites más claros durante interacciones frustrantes o irritantes, según los autores del trabajo.

"Esta investigación muestra que el entrenamiento en mindfulness beneficia a los médicos a nivel individual, a través de un manejo más eficaz de los factores estresantes ocupacionales", según expuso una de las autoras, Elli Weisbaum , profesora asistente en el departamento de psiquiatría de la Facultad de Medicina de Temerty (Canadá).

"Los hallazgos de este estudio son alentadores para todos los profesionales de la salud interesados ​​en desarrollar lugares de trabajo saludables y compasivos. Esperamos que estos resultados contribuyan al cambio tanto a nivel individual como sistémico", concluyó dicha experta.