Un equipo investigador ha determinado que la expresión de los genes CEP120 y SPDL1, tanto individualmente como en combinación, es un rasgo distintivo de los pacientes que presentan degeneración de discos intervertebrales (DDI). En comparación con los individuos sanos, los pacientes exhibieron, además, un menor de células natural killer circulantes ...
Un equipo investigador ha determinado que la expresión de los genes CEP120 y SPDL1, tanto individualmente como en combinación, es un rasgo distintivo de los pacientes que presentan degeneración de discos intervertebrales (DDI). En comparación con los individuos sanos, los pacientes exhibieron, además, un menor de células natural killer circulantes y mayor de neutrófilos y de células inmunosupresoras de origen mieloide. En el análisis de potenciales dianas moleculares los científicos hallaron que ambos genes actúan sobre 17 microARNs y 120 factores de transcripción, formando una red de interacciones que puede ser modulada por varias decenas de fármacos y compuestos tóxicos ambientales. Entre estos últimos, el benzopireno derivado del humo del tabaco aceleró la degradación de colágeno y proteoglucanos de los discos intervertebrales en ratas. El valor diagnóstico de CEP120 y SPDL1 fue confirmado mediante técnicas tradicionales de biología molecular aplicadas en muestras de pacientes y controles.
Jianzhong Huo, investigador de la Universidad Médica de Shanxi y co-director del estudio, afirma que los discos intervertebrales representan un complejo tejido cartilaginoso, cuya matriz extracelular es esencial en la gestión del estrés mecánico en la columna vertebral. Su homeostasis puede verse alterada por el avance de la edad, el exceso de carga o la exposición a agentes químicos, lo que promueve la degradación de las macromoléculas asociadas y el subsiguiente desarrollo de la DDI. Aunque el estudio no determina cuál es la función específica de los genes identificados, Huo asegura que futuras investigaciones contribuirán a dilucidar su papel en la etiología de la DDI.