El cáncer de mama es el segundo cáncer más común y la segunda causa de muerte por cáncer. Cuanto antes se detecte un tumor maligno, mayores serán las posibilidades de supervivencia de una mujer. En ello han trabajado investigadores de la Universidad de Waterloo (Canadá) que se han convertido en pioneros en un método para detectar tumores mamarios en mujeres con la antelación suficiente para que puedan recibir un tratamiento que les salve la vida.

La tecnología innovadora pretende ser más precisa y más económica que las herramientas de diagnóstico más comunes en la actualidad, como la mamografía de rayos X, la ecografía y la resonancia magnética (MRI). Según se expone en el estudio publicado en ´Nature Scientific Report´, las pruebas se completaron en dos minutos y se consumió menos energía que un teléfono inteligente. También sería más segura que los rayos X, que exponen a los pacientes a radiación de alto nivel que puede dañar el ADN y causar cáncer.

Técnica económica y fiable

"Estamos tratando de hacer una contribución seria a la salud de las mujeres y crear una alternativa que sea clínica y comercialmente viable", proporcionando un método para la detección del cáncer de mama en una etapa temprana que sea económico e inofensivo para las mujeres", explicó el Dr. Omar Ramahi, investigador principal y profesor del Departamento de Ingeniería Eléctrica e Informática de Waterloo".

El Dr. Ramahi comenzó a explorar nuevas formas de detectar el cáncer de mama en fase temprana a partir de 2001 y, durante los últimos cinco años, ha estado estudiando el potencial de las ondas electromagnéticas de baja frecuencia.

El dispositivo de diagnóstico desarrollado simula, en cierto modo, la mamografía de rayos X, pero sin sus inconvenientes. En lugar de rayos X, una antena, como la que se encuentra en un teléfono inteligente, emite energía electromagnética de baja frecuencia. Una vez que la energía penetra los senos de una paciente, es captada por una metasuperficie o placa de circuito, que consta de píxeles de un extremo a otro, cada uno de los cuales actúa como un receptor.

Por su parte, con ayuda de la IA, se interpreta las imágenes provenientes de la placa de circuito, eliminando la necesidad de que un técnico humano revise los resultados. La tecnología puede localizar el tamaño y la ubicación de un tumor, incluso en mamas con tejido denso, algo que los sistemas de diagnóstico actuales pueden pasar por alto.

Los próximos pasos de los investigadores son desarrollar un sistema que pueda probarse en seres humanos y que su uso pueda extenderse a todos los países del mundo para que las mujeres lo utilicen con la misma comodidad y frecuencia que, por ejemplo, las pruebas de presión arterial en las farmacias.