Publicidad
Publicidad

El control de la placenta mediante ecografía puede beneficiar a los bebés de bajo peso

Resulta de especial relevancia rastrear qué bebés son más pequeños debido a una placenta defectuosa durante el embarazo. Con ayuda de la ecografía doppler se puede detectar la evolución de su crecimiento.

06/02/2024

Desde hace casi cinco décadas se vienen utilizando las ecografías doppler para detectar a los bebés pequeños, y poder comprobar si siguen su propio patrón de crecimiento o si evolucionan más lentamente. A través de dichas pruebas también se puede controlar si la placenta está funcionando correctamente o no. En esta ...

Desde hace casi cinco décadas se vienen utilizando las ecografías doppler para detectar a los bebés pequeños, y poder comprobar si siguen su propio patrón de crecimiento o si evolucionan más lentamente. A través de dichas pruebas también se puede controlar si la placenta está funcionando correctamente o no.

En esta materia, una reciente investigación realizada por la Universidad de Amsterdam (Países Bajos) muestra cómo esta medición aporta un valor añadido para detectar embarazos en bebés demasiado pequeños con una placenta defectuosa. "Ya se sabía lo que era posible con una ecografía Doppler, pero aún no es una práctica estándar en todos los hospitales", según Mauritia Marijnen, candidata a doctorado en la UMC de Ámsterdam y primera autora del estudio.

Al añadir esta ecografía Doppler al plan de cuidados de estos bebés de tamaño insuficiente, se puede detectar y controlar mejor un posible riesgo de problemas relacionados con el parto.

Placenta disfuncional

En concreto, esta ecografía mide la resistencia de los vasos sanguíneos del cordón umbilical, lo que dice algo sobre el flujo sanguíneo a la placenta. Asimismo, puede medir el suministro de sangre al cerebro del niño. Si el suministro es mayor de lo habitual, puede ser una señal de que la placenta no está funcionando tan bien.

"Los bebés pequeños para los que la medición es normal también pueden ser controlados con menos intensidad. Por lo tanto, existe una mayor probabilidad que el parto se produzca de forma natural, sin intervención", indica, por su parte, Wessel Ganzevoort, profesor asociado de obstetricia en la UMC de Ámsterdam y coordinador de este estudio.

Alrededor del 10% de los fetos se clasifican como pequeños para su edad gestacional. Si estos bebés todavía están sanos, no hay necesidad de intervención durante el embarazo. Pero en el caso de que sean pequeños y además estén envueltos en una placenta disfuncional, se necesita actuar e inducir el nacimiento del bebé si fuera necesario. "Esto significa que es muy importante rastrear qué bebés son más pequeños debido a la placenta", según el prof. Ganzevoort.

Publicidad
Publicidad