Los resultados de un metanálisis realizado sobre 41 ensayos clínicos aleatorizados revelan que la adición de inhibidores de las quinasas dependientes de ciclina (CDK4/6) a la terapia endocrina prolonga la supervivencia, en pacientes menopáusicas con cáncer de mama HR+/HER2-. Las mayores tasas de supervivencia libre de progresión fueron alcanzadas con ...
Los resultados de un metanálisis realizado sobre 41 ensayos clínicos aleatorizados revelan que la adición de inhibidores de las quinasas dependientes de ciclina (CDK4/6) a la terapia endocrina prolonga la supervivencia, en pacientes menopáusicas con cáncer de mama HR+/HER2-. Las mayores tasas de supervivencia libre de progresión fueron alcanzadas con la combinación de abemaciclib y letrozol en primera línea, mientras que la combinación de ribociclib y fulvestrant ofreció el mayor beneficio en términos de supervivencia global. En la segunda línea de tratamiento y en líneas ulteriores, la adición del agente biológico avelumab al régimen basado en inhibidores de CDK4/6 y degradadores selectivos de los receptores de los estrógenos prolongó ambos tipos de supervivencia.
Wenxi Tang, investigador de China Pharmaceutical University y codirector del estudio, afirma que esta última combinación se asoció a una ganancia de 2.76 años de vida a lo largo de una década. Las combinaciones formadas por dalpiciclib/fulvestrant y everolimo/exemestano fueron casi tan eficaces, con prolongaciones de 2.35 y 2.32 años, respectivamente, asegura el científico. Sin embargo, la quimioterapia con un único agente, ya fuera éste eribulina, gemcitabina o capecitabina, mostró mayor eficacia que algunas de las combinaciones examinadas, con una prolongación de 2.49 años. Tang prosigue indicando que, en términos de seguridad, fulvestrant fue el fármaco que menor asociación mostró con efectos adversos fatales en primera línea, mientras que el régimen con palbociclib y fulvestrant se asoció a la mayor incidencia de efectos adversos de cualquier grado. Los autores del estudio concluyen señalando que las pacientes portadoras de mutaciones en los genes PIK3CA y ESR1 se beneficiaron notablemente del tratamiento con capivasertib, alpelisib, camizestrant o elacestrant.