Científicos de la Universidad de Sichuan han examinado el potencial anticáncer de una amina terciaria (DMAEM) en un modelo de carcinoma oral escamoso, hallando que la inyección peritumoral, tres veces por semana, inhibe el crecimiento maligno y la expresión de un marcador de proliferación en las células cancerosas. En ensayos ...
Científicos de la Universidad de Sichuan han examinado el potencial anticáncer de una amina terciaria (DMAEM) en un modelo de carcinoma oral escamoso, hallando que la inyección peritumoral, tres veces por semana, inhibe el crecimiento maligno y la expresión de un marcador de proliferación en las células cancerosas. En ensayos in vitro los investigadores demostraron la inocuidad de este material en queratinocitos humanos derivados de la cavidad oral, en marcado contraste con su efecto sobre las células tumorales, en las cuales no sólo redujo su proliferación, sino también su capacidad de migración e invasión.
Lei Cheng, codirector del estudio, afirma que, a diferencia de los fármacos quimioterapéuticos convencionales, el DMAEM no induce disbiosis bacteriana, como se demostró en el análisis del microbioma en las diferentes regiones del tracto gastrointestinal. El investigador prosigue indicando que, en un entorno acídico como el que predomina en el tumor, el DMAEM adquiere un protón, convirtiéndose en un amonio cuaternario de elevada citotoxicidad. Aunque esta última estructura química ya había sido explotada como método de entrega de fármacos en diversos tipos de tumores sólidos, presenta limitaciones que pueden ser vencidas con el DMAEM, asegura Cheng. En efecto, el DMAEM se distingue por la reversibilidad de su citotoxicidad. Ésta se pierde en entornos de pH normal, pudiendo ser recuperada en medio ácido, lo que explicaría su selectividad frente al tumor. Los autores del estudio concluyen señalando que las propiedades del DMAEM sitúan a este compuesto en el escenario de potenciales candidatos a desarrollo clínico en el tratamiento del carcinoma oral escamoso.