Investigan el potencial del antígeno CD70 como diana terapéutica en diversos tipos de cáncer
El direccionamiento de la terapia celular a esta molécula resulta en la destrucción de las células tumorales y de sus fibroblastos asociados, los cuales son clave en la progresión del cáncer.
Investigadores de la Universidad de Amberes han generado células natural killer portadoras de receptores quiméricos (NK-CAR) que reconocen el antígeno CD70, el cual es expresado en células de adenocarcinoma ductal pancreático y de cáncer colorrectal, así como en los fibroblastos del microentorno de estos tumores. Estos NK-CAR de cuarta generación ...
Investigadores de la Universidad de Amberes han generado células natural killer portadoras de receptores quiméricos (NK-CAR) que reconocen el antígeno CD70, el cual es expresado en células de adenocarcinoma ductal pancreático y de cáncer colorrectal, así como en los fibroblastos del microentorno de estos tumores. Estos NK-CAR de cuarta generación incorporan un módulo de producción de interleucina-15, el cual potencia la actividad citotóxica in vitro en líneas celulares de estos tipos de cáncer, así como en células de linfoma de Burkitt CD70+.
Astrid Van den Eynde, directora del estudio, afirma que la adición de este módulo promueve la eficacia de la terapia celular in vivo, reduciendo la carga tumoral y prolongando la supervivencia en ratones portadores de linfoma humano. El valor del CD70 como diana terapéutica fue puesto de manifiesto por los científicos en el examen de múltiples conjuntos de datos transcriptómicos de pacientes con adenocarcinoma de colon, tumor en el que la expresión de CD70 en los fibroblastos asociados se correlacionó con la resistencia a la inmunoterapia con inhibidores de los puntos de control inmunológico. En el cáncer pancreático, en el que el número de fibroblastos CD70+ aumenta con la progresión de la enfermedad, las NK-CAR eliminaron progresivamente a estas células, asegura Van den Eynde. Notablemente, y en consonancia con estudios previos, la expresión de CD70 estuvo circunscrita a las células consideradas como diana, a excepción de unos pocos linfocitos infiltrados en el tumor. Esta especificidad pudo ser confirmada en el análisis de los linfocitos circulantes de individuos sanos, en los que los niveles de CD70 fueron bajos o indetectables. Algunos de los hallazgos han sido validados en organoides derivados de pacientes con cáncer de páncreas, lo que subraya las potencialidades de la terapia celular dirigida al CD70.
