El cáncer de pulmón mata a más de 1,8 millones de personas en todo el mundo cada año, según la Organización Mundial de la Salud. A pesar de tratamientos como la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia, sólo alrededor de una cuarta parte de todas las personas con la enfermedad ...
El cáncer de pulmón mata a más de 1,8 millones de personas en todo el mundo cada año, según la Organización Mundial de la Salud. A pesar de tratamientos como la cirugía, la radioterapia y la quimioterapia, sólo alrededor de una cuarta parte de todas las personas con la enfermedad podrán sobrevivir más de cinco años después del diagnóstico.
Precisamente, mejorar las probabilidades de los pacientes con cáncer de pulmón es el objetivo que se marcaron investigadores de la Universidad de Texas (UTA) en Arlington y el UT Southwestern Medical Center (EEUU) que han logrado desarrollar un novedoso método para administrar medicamentos contra el cáncer directamente en las células cancerosas.
"Nuestro método utiliza el propio material celular del paciente como caballo de Troya para transportar una carga útil de fármaco dirigida directamente a las células del cáncer de pulmón", explicó Kytai T. Nguyen, profesor de Bioingeniería Alfred R. y Janet H. Potvin en la UTA. "El proceso implica aislar células T (un tipo de célula inmune) del paciente con cáncer y modificarlas para expresar un receptor específico que se dirige a las células cancerosas".
Engañar al sistema inmunológico
La clave en esta nueva técnica está en aislar la membrana celular de estas células T modificadas, cargar las membranas con fármacos de quimioterapia y luego recubrirlas sobre pequeños gránulos de administración de fármacos. Estas nanopartículas tienen aproximadamente 1/100 del tamaño de un mechón de cabello.
Cuando estas nanopartículas recubiertas de membrana se inyectan nuevamente en el paciente, la membrana celular actúa como guía, dirigiendo las nanopartículas a las células tumorales con precisión. Este mecanismo permite engañar al sistema inmunológico del paciente, ya que las nanopartículas recubiertas imitan las propiedades de las células inmunes, evitando la detección y eliminación por parte del organismo.
Las nanopartículas recubiertas de membrana se acumularon en partes del cuerpo con tumores en lugar de en otras partes del cuerpo. Como resultado, este sistema de administración dirigida pudo reducir el tamaño de los tumores en el grupo de control. "Este enfoque personalizado podría allanar el camino para una nueva era de medicina adaptada a las características únicas de cada paciente y la naturaleza específica de su tumor", indicó el prof. Nguyen. "El potencial de reducir los efectos secundarios y mejorar la eficacia hace que nuestra técnica sea un avance notable en el campo del tratamiento del cáncer", agregó.